Calidad de vida

Efecto del uso de estrógenos más progestina

En mujeres postmenopáusicas el uso de estrógenos más progestina no tendría efectos clínicamente significativos sobre la calidad de vida relacionada con la salud.

Autor/a: Dres. Hays J, Ockene JK, Brunner RL, Kotchen JM

Fuente: N Engl J Med. 2003 May 8;348(19):1839-54. Epub 2003 Mar 17.

Antecedentes:

La Iniciativa de Salud de las Mujeres (WHI) y otros estudios clínicos indican algunos riesgos de salud significativos asociados con el uso de hormonas combinadas. Poco es lo que se conoce acerca del efecto de la terapia hormonal  sobre la calidad de vida relacionada con la salud.
 
Métodos:

El WHI asignó de manera randomizada 16.608 mujeres postmenopáusicas entre 50 y 79 años de edad (promedio, 63) con un útero intacto al inicio para recibir estrógeno más progrestina (0.625 mg de estrógeno equino conjugado más 2.5 mg de acetato de medroxiprogesterona, en 8.506 mujeres) o placebo (en 8.102 mujeres). Las mediciones sobre calidad de vida se recabaron al inicio y al año en todas las mujeres y a los 3 años en un subgrupo de 1.511 mujeres.
 
Resultados:

La randomización del grupo estrógeno más progestina no produjo efectos significativos sobre la salud general, vitalidad, salud mental, síntomas depresivos o satisfacción sexual. El uso de estrógeno más progestina estuvo asociado con un beneficio estadísticamente significativo pero pequeño y clínicamente no significativo en términos de trastornos del sueño, funcionamiento físico y dolor corporal luego de 1 año (la media de beneficio en términos de trastornos del sueño fue de 0.4 puntos en una escala de 20 puntos, en relación al funcionamiento físico de 0.8 puntos en una escala de 100 y en cuanto al dolor de 1.9 puntos en una escala de 100).

A los tres años, no se observaron beneficios significativos en relación a los resultados sobre la calidad de vida. Entre las mujeres de 50 a 54 años de edad con síntomas vasomotores de moderados a severos al inicio, el estrógeno más la progestina mejoraron los síntomas vasomotores y otorgaron un pequeño beneficio en relación a los trastornos del sueño pero no en relación a otros resultados sobre la calidad de vida.

Conclusiones:

En este estudio en mujeres postmenopáusicas, el estrógeno más la progestina no tuvieron efectos clínicamente significativos sobre la calidad de vida relacionada con la salud.