Experimentos de laboratorio con células humanas y de rata han permitido definir los múltiples pasos que inicia la COX-2, destacando el papel clave de una molécula conocida como monofosfato de adenosina cíclico (cAMP) y de las proteína conocidas como inhibidores de la apoptosis (IAP).
En "Proceedings of the National Academy of Sciences" escriben que el resultado de estas interacciones moleculares es la supresión de un proceso natural de destrucción celular que posee el organismo y, consecuentemente, el crecimiento celular incontrolado.
Asimismo, el hallazgo ayuda a explicar cómo algunos antiinflamatorios no esteroides reducen la incidencia del cáncer de colon, debido a que inhiben la COX-2 y permiten que el organismo mantenga su proceso natural con el que destruye las células tumorales.
Los autores añaden que, si bien su investigación se centró en el cáncer de colon, los resultados tienen implicaciones en la comprensión de otros tipos de tumor no intestinales en los que la COX-2 también se encuentra implicada, tales como el de pulmón, próstata, carcinomas de células escamosas de cabeza y cuello y algunos tumores mamarios.
Webs Relacionadas
University of California, San Diego
http://www.ucsd.edu/
Proceedings of the National Academy of Sciences
http://www.pnas.org/