A pesar de estar prohibido, es común observar vendedores ambulantes ofreciendo loros y cotorras en terminales de ómnibus y estaciones de tren.
Por ejemplo, se han visto recientemente en la Plaza Constitución de Buenos Aires, donde los vendedores ambulantes ofrecen loros barranqueros y cotorras comunes con la cabeza teñida de amarillo o decolorada, haciéndolos pasar por especies raras.
La venta ambulante de animales silvestres no sólo está prohibida, sino que constituye un peligro para la salud humana. Estos animales no tienen ningún tipo de control sanitario y por las malas condiciones en que son capturados, transportados y mantenidos en cautiverio tienen alta posibilidad de estar enfermos. De hecho, muchos ejemplares decomisados presentan psitacosis, enfermedad que -mal diagnosticada o tratada- puede resultar mortal para los animales y el ser humano.
Si se observan a la venta animales silvestres en la vía pública, puede brindar sus datos a Vida Silvestre para que podamos presentar la denuncia correspondiente ante las autoridades gubernamentales. Juntos, podemos atacar este problema. Todo aquel que desee comprar una mascota, hágalo en un comercio donde las especies estén saludables y sean de origen legal. Si tiene dudas, contáctese con la Dirección de Fauna y Flora Silvestres de la Nación (tel: 4 348-8551).