"Los orígenes de la primera biblioteca se remontan, seguramente, a los primeros siglos del papado, aunque no hay documentos de ese período.”
Con estas palabras, la Biblioteca Apostólica Vaticana invita a los navegantes que acceden a su sitio en Internet a recorrer un mundo fascinante de manuscritos, incunables, iconos, libros y un sinnúmero de tesoros de la cultura universal.
En total, el equivalente a un estante de 90 kilómetros de largo, aunque la gran mayoría de las personas no podrá curiosear los pasillos de la Biblioteca. Sólo investigadores y docentes tienen permitido el ingreso.
Sin embargo, el catálogo, que contiene aproximadamente un millón y medio de volúmenes y 150.000 manuscritos, se puede consultar desde la semana última en el sitio del Vaticano .
“Los libros y los manuscritos de la Biblioteca no se podrán leer en el sitio. Habrá que conformarse con el catálogo y algunas imágenes ilustrativas que hemos puesto on line”, explicó a LA NACION LINE el bibliotecario de la Santa Sede, el cardenal argentino Jorge Mejía.
El catálogo de libros, disponible en italiano e inglés, incluye un buscador que permite a partir de ciertas palabras clave husmear los títulos que se conservan en las estanterías.
“Hicimos el site como un modo de responder las consultas que recibíamos a diario”, agregó Mejía.
Es para destacar la sección Tesoros de la Biblioteca, que contiene una pequeña muestra de manuscritos, imágenes sagradas y diferentes versiones incunables de la Biblia. Quien accede a esta página podrá observar los detalles que adornaban los textos sagrados durante la Edad Media, así como antiguos planos de Roma.
Allí mismo se puede ver una selección de la muestra “El Evangelio de los pueblos”, montada en Roma de junio a diciembre de 2000. De esta manera, los cibernautas asistirán a un breve recorrido histórico por la palabra y la imagen de Cristo en Occidente y los modos en los que el Evangelio se propagó por Europa.
El proyecto, prevé la construcción de otro sitio para los Museos Vaticanos que permitirá recorrer en forma virtual las salas para descubrir los asombrosos tesoros que cada año atraen a cientos de miles de visitantes. Asimismo, está previsto que también puedan ser consultados los archivos secretos de la Santa Sede.
La Biblioteca Apostólica Vaticana fue fundada por el papa Nicolás V en el siglo XVI. Se trata de una biblioteca histórica y cuenta con talleres de restauración para preservar el material que se guarda dentro de sus muros.
(ir a Biblioteca Vaticana)