Este artículo como su título lo indica trata sobre el problema o la realidad de porqué el personal de enfermería ve a los familiares de sus pacientes como un problema y porque con mucha frecuencia la familia tiene la percepción de que enfermería es poco comunicativa, debiendo hacer un giro en nuestra practica que nos permita fomentar el cuidado centrado en la familia.
Los autores Levin y Zuckerman hacen un análisis sobre la relación entre las familias y el equipo de salud, y ellos sugieren que los profesionales deben cambiar la presunción "naive" ( ) que la familia es igual a un problema a asumir aquella posición en la cual se busquen los intereses de la familia en la toma de decisiones y en la administración del cuidado y tratar a las mismas como "socios en el cuidado".
Este artículo proporciona información para el personal de enfermería de conducción que muchas veces negocia entre los miembros de la familia y el personal de enfermería como parte de la práctica.
Se hace una mención a la reforma de salud con la cual muchos pacientes son dados de alta precozmente y en el domicilio dependen de su familia para los cuidados, y en esta etapa que significa un gran ahorro para los sistemas de salud, no se considera a la familia demasiado emocional o no capacitada para brindar cuidados.
Sin embargo en las áreas de cuidado intensivo, se espera que las familias asuman un rol de mucha deferencia para con el equipo de salud, dejando en sus manos los juicios y toma de decisiones así como las sacrosantas rutinas que realizan con su familiar.
Una visión aparentemente negativa y de desconfianza hacia la familia crea un conflicto potencial y deteriora una comunicación efectiva.
¿Dónde comienza esta actitud del equipo de salud y como podemos cambiarla?
Tradicionalmente tanto la medicina como la enfermería siempre tuvieron su área principal de preocupación en el individuo. En contraste con este concepto de cuidado NO centrado en la familia aparece el cuidado CENTRADO en la familia que se caracteriza por la colaboración entre el paciente, la familia y los profesionales del cuidado de la salud y reconoce la diversidad, las fortalezas e individualidades dentro y entre las familias. Un estudio reciente del departamento de urgencias del Hospital Parkland sugiere el beneficio de la presencia de los familiares que acompañan a los pacientes a la emergencia.