Estudio realizado en 33 hospitales londinenses

Elección de fluídos para la resucitación por shock séptico

Pocos departamentos pediátricos han escrito protocolos para el manejo del shock séptico al que pueden acceder todos aquellos que se preocupan por el tratamiento agudo de niños seriamente enfermos.

Autor/a: Dres. Sparrow A, Hedderley T, Nadel S

Fuente: Emerg Med J 2002 Mar;19(2):114-6

Objetivos:

Determinar la elección del fluido para la resucitación en niños en la práctica corriente, siguiendo la publicación de una revisión sistemática que demostró una mayor mortalidad en pacientes tratados con solución de albúmina humana.
 
Métodos:

Una encuesta por cuestionario telefónico y postal orientada a médicos pediatras en 33 hospitales dentro del área de Londres (Inglaterra). Es estudio fue coordinado por la Unidad de Terapia Intensiva Pediátrica del Hospital St Mary, en Londres. El cuestionario fue llevado a cabo para determinar la existencia o no de un protocolo/instructivo para los fluidos de resucitación en niños con shock séptico; así como si los participantes estaban enterados de la existencia de la revisión sistemática publicada y en ese caso, si habían cambiado sus prácticas clínicas en base a la misma. La palabra "protocolo" fue utilizada en su sentido más amplio, para incluir las políticas y directivas.
 
Resultados:

Un total de 11 hospitales tenían instructivos para la resucitación con fluidos en niños con shock séptico. Los mismos variaron ampliamente: solo tres daban instrucciones claras acerca de qué fluido utilizar y cómo utilizarlo. La elección del fluido varió ampliamente y se observó una gran discrepancia entre la elección del fluido de los participantes y los archivos. La revisión sistemática había provocado un cambio de la política en dos tercios de los participantes de la encuesta.

Conclusión:

Aparentemente, pocos departamentos pediátricos han escrito protocolos o instructivos para el manejo del shock séptico, al que pueden acceder todos aquellos que se preocupan por el tratamiento agudo de niños seriamente enfermos. La revisión sistemática sobre la elección del fluido ha tenido un impacto sobre la práctica clínica sin datos con respecto a si esto es lo mejor para el paciente.