La investigación, publicada por "JAMA", se basa en un seguimiento realizado en Estados Unidos a escala nacional, denominado Heart and Estrogen/Progestin Replacement Follow-up Study (HERS II). El objetivo del estudio HERS I fue determinar los efectos de los estrógenos y la progestina (comparados con el placebo) en mujeres en la posmenopausia con afecciones cardíacas. En 1998, los autores de este estudio indicaron que, sorprendentemente, el riesgo de ataque cardíaco aumentaba en el grupo de terapia hormonal durante el primer año.
Este riesgo, sin embargo, pareció descender en los siguientes años, derivando en el siguiente estudio, HERS II, para evaluar los efectos de larga duración de la THS. Se observó que la tendencia a una reducción del riesgo de ataque cardíaco no persistió con un seguimiento adicional.
Durante casi siete años, de la combinación de resultados de HERS y HERS II no se dedujo que se redujera el riesgo entre las mujeres que seguían dicha terapia. Las conclusiones de este seguimiento indican que no se encontró reducción alguna en el riesgo de ataques cardíacos o de muerte en las mujeres con afecciones cardíacas durante siete años de THS.
No sólo no se registró beneficio cardiovascular sino que se produjeron efectos adversos como coágulos sanguíneos y afecciones de la vesícula. La terapia hormonal elevaba al doble el riesgo de coágulos sanguíneos en las piernas y pulmones, con la mayoría de este aumento de riesgo en los primeros años de tratamiento, según los autores del estudio. Por otra parte el aumento en el riesgo de afecciones de la vesícula aumentaba en cerca de un 50%.
Webs Relacionadas
HERS II
http://prevention.stanford.edu/research/studies/women_hers2.html/
JAMA
http://jama.ama-assn.org/subs/login.html