En su estudio llevaron a cabo el seguimiento de estudiantes de medicina varones desde que eran adultos jóvenes hasta que alcanzaron edad mediana. Aquellos que practicaban tenis pudieron seguir con este deporte a dicha edad y, al contrario que el fútbol americano o el baloncesto, el tenis se relacionó con un menor riesgo de enfermedad cardiovascular, en particular con el infarto de miocardio, a la edad de 60 años.
En opinión de los autores, el tenis y otras actividades aeróbicas, como correr o ir en bicicleta, pueden mantenerse a lo largo del tiempo y constituyen formas de ejercicio saludables para el corazón.
Webs Relacionadas
Johns Hopkins University
http://www.jhu.edu/
The American Journal of Medicine
http://www.amjmed.org/