Anorexia

Los varones con anorexia también experimentan pérdida de masa ósea

Los Servicios de Psiquiatría y Psicología Infantil y Juvenil, de Medicina Nuclear y de Endocrinología del Hospital Clínic de Barcelona, coordinados por la Dra. Josefina Castro, han aunado esfuerzos para conseguir determinar los factores que provocan la pérdida de masa ósea en los pacientes varones adolescentes que sufren anorexia. Este grupo hasta el momento poco conocido y estudiado, representa un 10% del total de pacientes tratados por esta afección.

Hasta ahora la gran mayoría de estudios realizados sobre la anorexia, sus causas y consecuencias, se basaban en pacientes femeninas adultas con un alto desarrollo de la enfermedad. En la mayoría de los casos, las pacientes desarrollan a corto plazo osteopenia (reducción de la calcificación de los huesos) y a largo plazo osteoporosis (aumento de la porosidad en los huesos) que aumenta considerablemente el riesgo de fracturas. Para determinar la pérdida de masa ósea se realizan mediciones de la densidad mineral ósea (BMD) de los pacientes incluidos en el estudio en el momento del diagnostico y trascurrido un tiempo de tratamiento desde la primera prueba. En el estudio se observó que el factor determinante en la pérdida de BMD era la duración de la enfermedad.

El presente estudio, publicado en el último número del "Journal of American Academy of Child and Adolescent Psychiatry", se centró en ampliar el conocimiento de las repercusiones óseas en varones adolescentes. Se observó que aquellos pacientes que sufrían anorexia nerviosa tenían una mayor reducción en el BMD que los adolescentes de la población general y sufrían además una deficiencia hormonal que afectaba de forma negativa al metabolismo del calcio y los huesos. Se llegó a la conclusión de que, como en el caso de las pacientes femeninas, la variable que en mayor medida determinaba directamente la pérdida de masa ósea era la duración de la enfermedad. Si los pacientes recuperaban totalmente el peso y la función hormonal, presentaban un incremento de masa ósea superior al normal compensando así, al menos en parte, la pérdida inicial.

Dado que mientras el adolescente no se recupera del todo continúa perdiendo masa ósea, se hace evidente la importancia de detectar de manera temprana la enfermedad y realizar un seguimiento posterior para conseguir alcanzar un peso y una función hormonal normal durante la adolescencia.

 Webs Relacionadas
Journal of American Academy of Child and Adolescent Psychiatry
http://www.jaacap.com/
Hospital Clínica de Barcelona
http://www.csc.es/