En pacientes con sindrome de apnea del sueño, el tratamiento con CPAP (del inglés: Continuous Positive Airway Pressure) normaliza tanto el índice de apnea-hipopnea (número de episodios de apnea-hipopnea/hora) y los síntomas diurnos (somnolencia excesiva). Sin embargo, dicen los autores, no está claro cuál es el efecto de la CPAP en personas con un Indice patológico de apnea-hipopnea sin somnolencia diurna.
Con el motivo de aclarar este interrogante, los investigadores evaluaron los efectos a corto plazo de la CPAP en la calidad de vida, la somnolencia, objetiva, la función cognitiva y la presión arterial.
El trabajo fue aleatorizado y controlado con placebo e incluyó grupos paralelos de múltiples centros de atención, de 6 hospitales escuela de España. Se incluyeron 55 pacientes con un índice de apnea-hipopnea de 30 o más, quienes no padecían de somnolencia diurna (Puntaje apara la Escala de Epworth para la somnolencia £10).
Luego de observar al grupo tratado con CPAP y al grupo con placebo durante 6 semanas, los autores comprobaron que los pacientes con un índice de apnea-hipopnea de 30 o más sin somnolencia diurna subjetiva no se beneficiaban con el tratamiento con CPAP basado en falta de modificación de la calidad de vida, la somnolencia objetiva, el estado de alerta, la atención, la memoria, el procesamiento de la información, la coordinación visual-motora ni la presión arterial.
Como conclusión los autores afirman que la CPAP no está indicada en los pacientes sin somnolencia diurna, a pesar de tener un índice de apnea-hipopnea patológico.