Virus de herpes simple

Historia natural de infecciones de virus de herpes simple neonatal en la era del aciclovir

La comparación de la enfermedad del virus de herpes simple neonatal durante la década del ’80 y del ’90 demuestra que no se han realizado progresos en la disminución del intervalo entre el inicio de los síntomas del virus de herpes simple y el comienzo de la terapia antiviral. Sólo si se acortara dicho intervalo, se obtendrían avances adicionales para mejorar los resultados de la enfermedad.

Durante las dos últimas décadas las terapias antivirales efectivas han estado disponibles para la enfermedad del virus de herpes simple (HSV) neonatal, al mismo tiempo varios  cambios han sido documentados no sólo en los resultados de los infantes infectados, sino también en la historia natural de la enfermedad. Previamente, numerosos estudios han reportado que la institución temprana de la terapia antiviral es beneficial para los resultados de la enfermedad.  Basados en estos antecedentes, un estudio realizado por investigadores norteamericanos tuvo como objetivo la actualización de la enfermedad de HSV neonatal para identificar los medios a través de los cuales se lograran mejorías futuras en el manejo de los neonatos infectados con HSV.
El estudio empleó datos de neonatos inscriptos en dos estudio del aciclovir parenteral para el tratamiento de enfermedad de HSV neonatal, llevados a cabo entre 1981 y 1997. Un total de 186 pacientes fueron seleccionados, todos ellos tratados con aciclovir. Ambos estudios reportaron las características demográficas y clínicas de los pacientes.
Las comparaciones realizadas entre pacientes tratados en los periodos entre 1981-1988 y 1989-1997 en relación a la extensión de la enfermedad reveló que el tiempo medio entre el inicio de los síntomas de la enfermedad y el comienzo de la terapia no cambió significativamente entre el principio de los ochenta y el final de los noventa. De todos los pacientes evaluados, el 40% padeció monitoreos fetales de cuero cabelludo durante el parto.
 Una minoría significativa de pacientes no padeció vesículas de piel ni las desarrollaron durante la enfermedad de HSV aguda (39% de los pacientes con enfermedad diseminada; 32% de los pacientes con enfermedad en sistema nervioso [CNS] central; y 17% de los pacientes con enfermedad en  piel, ojos y/o boca). Entre los pacientes con enfermedad en
CNS, la mortalidad estuvo asociada con la premadurez. Entre los pacientes con enfermedad de HSV diseminada tratados con aciclovir a 30mg/Kg/d, la mortalidad estuvo asociada con elevaciones de transaminasa aspartate de ³10 veces del límite superior al normal registrado al comienzo de la terapia con aciclovir. Asimismo, la mortalidad también estuvo asociada con el retraso en la iniciación de la terapia antiviral para pacientes con enfermedad diseminada. El nivel de moribilidad de los pacientes estuvo asociado con la extensión de la enfermedad (enfermedad en piel, ojo, y/o boca vs. en CNS vs. Diseminada). Para aquellos pacientes con enfermedad en CNS, la morbilidad también estuvo asociada con las crisis producidas durante el comienzo de la terapia antiviral.
Los datos presentados en esta comparación de la enfermedad de HSV neonatal a través de dos períodos (1981-1988 vs. 1989-1997) demuestran que no se han realizado progresos en la disminución del intervalo entre el inicio de los síntomas de HSV y el comienzo de la terapia antiviral.  Avances adicionales para mejorar los resultados de la enfermedad podrían ocurrir sólo si se acortara dicho intervalo. En opinión de los investigadores del estudio, los medios por los cuales estos logros podrán ser alcanzados yacen en el aumento del estudio detenido de las infecciones de HSV neonatal en infantes con enfermedad aguda.