Alzheimer

El fenómeno de "sundowning" en la enfermedad de Alzheimer

El fenómeno de exacerbación al final del día o con la caída del sol se ha denominado en inglés "sundowning" o sea, con la caída del sol coincidente con la ocurrencia o exacerbación de síntomas de conducta en pacientes con enfermedad de Alzheimer.

Los autores encontraron que los pacientes con enfermedad de Alzheimer tenían menos actividad motora durante el día y un más alto porcentaje de actividad nocturna que el grupo usado como comparativo.

Había menos estabilidad en la actividad motora y las mediciones de la temperatura corporal, mostraron que los pacientes con enfermedad con enfermedad de Alzheimer tenían temperaturas más altas y mayor amplitud de la curva de temperatura, lo mismo en relación con el grupo control.

El patrón de alteraciones sugería que las anormalidades circadianas se incrementaban en relación con el deterioro congnoscitivo y funcional. El fenómeno del sundowning o del atardecer y anochecer, fue encontrado en 11 de los 25 pacientes, o sea en 44%, una prevalencia mayor que la observada en grupos poblacionales alojados en ancianatos donde ese fenómeno ocurre en 13% de los casos.

Sin embargo, el fenómeno del atardecer y anochecer es más frecuente en los pacientes que viven en sus hogares donde se ha reportado un 66% de ocurrencia.

Los autores consideran que es posible que la enfermedad de Alzheimer afecte la función hipotalámica y por lo tanto interfiera con la regulación corporal de la temperatura. Además de los nudos neurofibrilares hipotalámicos, se han detectado anormalidad neuroquímicas como menor actividad de la colina acetil transferasa y de las concentraciones de serotonina.

En el estudio aquí reseñado hubo una disociación entre el trastorno del atardecer y anochecer en cuanto a la actividad motora y el trastorno del sueño observado en algunos pacientes, y por tanto parece que son dos tipos de síntomas de la demencia no relacionados necesariamente entre sí.

En todo caso, es sugestivo que la enfermedad de Alzheimer sea responsable de trastornos del ritmo circadiano y que el fenómeno del atardecer y anochecer se asocie a un retardo en la temperatura corporal, fruto del cambio en el círculo circadiano, a su vez relacionado con alteraciones anatomopatológicas de la enfermedad de Alzheimer, por ubicación en zonas de alta sensibilidad en relación a esos fenómenos, como es la región supraquiasmática o hipotálamo.