Investigadores del Instituto Noruego de Ciencia y Tecnología en Trondheim y de varios centros británicos muestran que las aves que poseen un hipocampo de mayor tamaño son capaces de recordar durante más tiempo dónde están sus nidos que aquellas que cuentan con esta región cerebral más pequeña.
El año pasado, un estudio realizado con taxistas londinenses ya reveló que estos profesionales poseen un hipocampo de mayor tamaño del normal, lo que se relaciona con una mayor capacidad de aprendizaje y memoria espacial.