Despedida al Dr. Daniel Flichtentrei

Al maestro, con cariño: ¡Hasta pronto, Daniel!

Se va un imprescindible, quien tras más de dos décadas compartió saberes y supo construir una comunidad antes de que la palabra “comunidad” se pusiera de moda.

Fuente: IntraMed

Después de casi 25 años de dedicación inquebrantable, nos toca despedir a nuestro compañero, el Dr. Daniel Flichtentrei, una persona que hoy elige nuevos caminos, pero que tanto para miembros de la comunidad médica como para los que se dedican a comunicar Salud, es casi un sinónimo de IntraMed.

Más allá de su compromiso con la construcción de la identidad del sitio, la mayoría de ese tiempo también ejerció como cardiólogo. Para Daniel, dejar de ver pacientes no era una opción imaginable, al punto de recibir en su oficina a cada compañero de trabajo que, ante un problema de salud, necesitaba ser escuchado y contenido.

Supo ponerse al hombro no sólo la curaduría de artículos, sino también el dictado de clases en las que proponía relacionar medicina, ciencia, arte y filosofía. Un ejemplo es su célebre “Cátedra libre”, donde reflexionaba sobre cómo comemos, la biología del estrés y el humanismo médico, a través de difundir herramientas como la medicina narrativa.

Fanático de las historias y del conocimiento, siempre se lo veía con algún libro y, al entender que leer era una necesidad de sus colegas, propició espacios como talleres y foros de discusión. También hizo posible que IntraMed lanzara una colección de seis títulos propios, cuatro antologías en donde fueron convocados escritores de renombre y dos de su propia autoría, Cerebro clínico y La verdad y otras mentiras.

Pionero en comunicar la medicina en distintos formatos, fue impulsor de documentales y hasta de los  primeros “podcasts” creados para IntraMed. También ideó y condujo concursos de relatos y hasta de fotografías para los profesionales de la salud.  

Siempre del lado del médico que entrega su vida sin pedir nada a cambio, se ocupó de darles visibilidad a las historias cotidianas detrás de cada “verdad” científica. Compartió cada concepto y formó tanto a médicos como a compañeros, porque para él el conocimiento debía ser de todos.

En síntesis, Daniel se encargó de crear una comunidad antes de que la palabra “comunidad” se pusiera de moda. Durante estos años, dejó su huella en cada una de las personas que lo conocimos. Le deseamos éxitos en sus nuevos desafíos que, sabemos, encarará con la misma pasión de siempre.

Con gratitud y cariño, te decimos: ¡Hasta pronto Daniel!

Tus compañeros de IntraMed.