Actividad física y síntomas de depresión en la infancia | 15 MAY 17

Actividad física, sedentarismo y depresión mayor en la infancia

Estudio sobre la relación entre el nivel de actividad física, el sedentarismo y los síntomas depresivos en niños
INDICE:  1. Página 1 | 2. Página 1
Página 1

INTRODUCCIÓN

Tanto los estudios observacionales como de tratamiento indican que la actividad física (AF) -y la AF moderada a vigorosa (AFMV), en particular- puede reducir la probabilidad de un trastorno depresivo mayor (TDM) y/o reducir los síntomas de TDM en adolescentes y adultos. Está cada vez más claro que la depresión también se puede presentar en niños pequeños.  Los esfuerzos preventivos y de tratamiento para la depresión infantil sólo son modestamente eficaces, lo que sugiere que deben buscarse intervenciones alternativas o complementarias.

La AFMV podría servir como una estrategia para prevenir o reducir la depresión infantil. De hecho, un metaanálisis de estudios quasi experimentales entre niños en la infancia tardía y en la adolescencia temprana sugirió un pequeño efecto a corto plazo de las intervenciones de la AF. Teniendo en cuenta que la depresión va creciendo y menguando, es importante discernir si están presentes efectos a largo plazo. Con este fin, podrían ser valiosos los estudios comunitarios prospectivos.

Es importante destacar que el retraso psicomotor es 1 síntoma de TDM, y que los niños deprimidos muestran mayores niveles de inactividad motora que los controles, lo que puede explicar la asociación reportada. Por lo tanto, son necesarios estudios longitudinales para revelar si la depresión predice una AF reducida y si la reducción de la AF aumenta el riesgo de depresión infantil, como fue demostrado en adolescentes y adultos. Además, según los autores, ningún estudio longitudinal examinó la relación entre AF y depresión en la niñez utilizando una muestra basada en la comunidad.

Para identificar los efectos potencialmente beneficiosos de la AF sobre la depresión (y viceversa) en niños no referenciados, los autores examinaron la relación bidireccional entre la AFMV y los síntomas de depresión, mientras abordaban varias cuestiones metodológicas importantes. En primer lugar, los estudios observacionales previos casi midieron en forma exclusiva la depresión mediante escalas de calificación; sin embargo, la correspondencia entre las puntuaciones de las escalas y los resultados de las entrevistas de diagnóstico clínico fue solo moderada.

En segundo lugar, los estudios de la relación AF-depresión en niños y adolescentes utilizaron mayormente métodos indirectos para medir la AF de los niños (es decir, informes de padres o auto-informe, los que están sólo moderadamente asociados con la AF objetivamente medida); de hecho, la AF en los niños de la comunidad puede estar sobrestimada usando métodos indirectos. Por lo tanto, para evitar los confundidores debido al sesgo de reporte, la relación AF-depresión debe investigarse utilizando medidas objetivas de AF. En tercer lugar, el sedentarismo y la AFMV están correlacionados negativamente, pero no perfectamente correlacionados.

En otras palabras, algunos niños pueden ser periódicamente muy activos, pero pueden pasar mucho tiempo dedicados a actividades sedentarias. Una cantidad sustancial de investigaciones se centró en la AFMV; sin embargo, varios estudios revelaron que el comportamiento sedentario, no necesariamente la AFMV, podría predecir depresión.

Por lo tanto, los autores investigaron en qué medida el tiempo destinado a actividades sedentarias predice síntomas de TDM sobre los efectos de la AFMV. En cuarto lugar, hay una considerable comorbilidad entre la depresión y otros trastornos psiquiátricos en niños, y estos trastornos podrían estar relacionados con la AF, confundiendo la relación entre la depresión y la AF como un resultado.

En quinto lugar, aunque la evidencia es mixta, se indica una relación bidireccional entre la depresión infantil y el IMC, por lo que se debe controlar por IMC. Para superar estos obstáculos, los autores investigaron las potenciales relaciones recíprocas entre los síntomas de depresión mayor definidos en el Manual Diagnóstico y Estadístico de Trastornos Mentales, Cuarta Edición (DSM-IV) obtenido utilizando entrevistas diagnósticas, y la AFMV y la actividad sedentaria reportada por acelerometría en una gran muestra comunitaria de niños noruegos supervisados bianualmente de 6 a 10 años controlando por IMC y otros síntomas psiquiátricos.


MÉTODOS

Participantes, reclutamiento y procedimiento

El estudio Trondheim Early Secure consta de niños de las cohortes de nacimiento 2003 y 2004 nacidos en Trondheim, Noruega (n=3456) que fueron reclutados por invitación por carta, junto con el Cuestionario de Fortalezas y de Dificultades (SDQ) versión 4-16.

Se obtuvo el consentimiento escrito para participar cuando concurrieron al control de salud habitual de la comunidad a los 4 años y se realizó el SDQ completo. La gran mayoría (n=3358, 97,2%) de los niños que fueron invitados a participar se encontraron en las clínicas de niños sanos de la ciudad. La puntuación total de problemas de SDQ (20 artículos) se dividió en 4 estratos (puntos de corte: 0 a 4, 5 a 8, 9 a 11 y 12 a 40), donde las probabilidades aumentan con el aumento de las puntuaciones SDQ (0,37, 0,48, 0,70 y 0,89 en los 4 estratos) para incrementar la variabilidad de la muestra.

Las mediciones de AF fueron incluidas a partir de la segunda ola de recolección de datos (6 años) y en adelante; por lo tanto, los datos utilizados en la presente investigación se tomaron de la información de los 6 años (2009 a 2011, n=795), 8 años (2011 a 2013, n=699), y 10 años (2013 a 2015, n=702). En total, 799 niños tenían datos utilizables de al menos 1 medición y, por lo tanto, constituyen la muestra analítica.

El desgaste no fue selectivo según las variables del estudio, excepto que más horas de AFMV a los 8 años predijo desgaste a los 10 años (odds ratio=2,38; intervalo de confianza [IC] 95%: 1,22 a 4,83, P=0,01); un sesgo por el que se ajustó en el análisis (véase análisis estadístico). El estudio fue aprobado por el Comité Regional de Ética de la Investigación Médica y de la Salud, Noruega.

♦ Mediciones

 Actividad física

Se instruyó a los niños para que utilizaran un acelerómetro ActiGraph GT3X (Manufacturing Technology, Inc, Fort Walton Beach, FL) alrededor de su cintura durante 7 días consecutivos, 24 horas al día, y que sólo se lo quiten al bañarse o ducharse.

Solamente se incluyó la actividad diurna (06:00-23:59). Las secuencias consecutivas de conteo cero con duración ≥20 minutos fueron interpretadas como tiempo sin uso. Sólo se incluyeron aquellos participantes con ≥3 días de grabaciones y ≥480 minutos de actividad por día. Debido a que la actividad de los niños pequeños es intermitente con cortos períodos de gran actividad, los autores emplearon los 10 segundos de duración que se usan comúnmente.

Los autores aplicaron el punto de corte de Evenson y colaboradores ≥2296 cpm para AFMV porque demostró una habilidad de clasificación superior en niños de las edades pertinentes para el presente estudio. Minutos por día con ≤100 cpm se consideró actividad sedentaria, un punto de corte que es ampliamente utilizado y tiene una excelente precisión de clasificación. En los análisis, la AFMV y la actividad sedentaria se representaron en intervalos de horas por día. Los datos fueron procesados usando el software de análisis de acelerómetro (ActiGraph LLC, Pensacola, FL).

 Síntomas de TDM

Se utilizó la Evaluación Psiquiátrica de Edad Preescolar (PAPA en inglés), una entrevista psiquiátrica completada por los padres usando un protocolo estructurado, con preguntas obligatorias y opcionales de seguimiento, para evaluar síntomas de TDM a los 6 años. Una puntuación sumaria de los síntomas de TDM definidos por el DSM-IV constituyó el resultado. A los 8 y 10 años, se utilizó la Evaluación Psiquiátrica del Niño y el Adolescente (CAPA en inglés).

Se entrevistó tanto a los padres como a los niños y se consideró que un síntoma estaba presente si era informado por el niño o por el padre. Los entrevistadores de PAPA y CAPA (n=9) tenían por lo menos un grado de licenciatura en un campo relevante y fueron instruidos por los desarrolladores de PAPA y CAPA. Para PAPA, el 9% de las grabaciones de audio de la entrevista fueron recodificadas por evaluadores cegados, como el 15% de las entrevistas de CAPA. La confiabilidad entre múltiples pares de evaluadores fue de 0,90 para síntomas de TDM en PAPA y de 0,83 en CAPA.

 Síntomas de otros trastornos psiquiátricos

Los síntomas de ansiedad (que consisten en un número de síntomas de fobia social, ansiedad de separación, ansiedad generalizada y fobias específicas), déficit de atención/hiperactividad (DAH), oposicionista desafiante (OD) y trastornos de la conducta (TCs) fueron evaluados siguiendo los mismos procedimientos que para los síntomas del TDM. Sólo los padres fueron entrevistados utilizando CAPA con respecto al DAH. La confiabilidad inter observador para PAPA/CAPA varió de 0,85 a 0,97.

 Índice de masa corporal

Se midió el peso de los niños utilizando una balanza digital (Tanita BC20MA), y se evaluó la altura utilizando un estadiómetro digital Heightronic (QuickMedical Model 235A). Se aplicó la corrección para la ropa utilizada (0,5 kg). El IMC se calculó como kg/m2.

♦ Análisis estadístico

Las relaciones recíprocas entre la AF y los síntomas de TDM se examinaron en Mplus 7.31, utilizando análisis autoregresivo cruzado dentro de un marco de ecuación estructural. Los síntomas de TDM, AFMV, y actividad sedentaria a la edad de 10 años fueron retrocedidos a las medidas de estas variables y covariables a los 8 años, mientras que las medidas de los 8 años fueron retrocedidas a las medidas de los 6 años. Para permitir efectos durmientes (es decir, los efectos de las medidas de los 6 a los 10 años salteando las medidas a los 8 años),  se permitieron los caminos autocorrelacionados desde los 6 a los 10 años.

Se permitió correlacionar las medidas obtenidas en el mismo punto en el tiempo (es decir, a los 6, 8, y 10 años, respectivamente). Para examinar los cambios globales en el nivel de TDM, el sedentarismo y la AFMV se realizaron análisis de curvas de crecimiento latente. Debido a que los análisis de desgaste indicaron que los datos que faltaban no eran aleatorios (MNAR en inglés), los datos faltantes fueron manejados de acuerdo a un procedimiento de verosimilitud de información completa máxima.

Debido a que los síntomas depresivos son sesgados, se utilizó un robusto estimador de verosimilitud, que es robusto para moderar desviaciones de la normalidad. Como se aplicó un sobremuestreo en base a los problemas de salud mental, se ponderaron los datos con un factor determinado como el número de niños en la población en cada estrato dividido por el número de participantes en cada estrato para llegar a la estimación correcta de la población. Para examinar las diferencias de género en las estimaciones, se empleó un test de Wald para comparar el ajuste de 2 modelos, uno en el que el camino a mano se fijó como idéntico para los dos sexos y el otro en el que el camino se estimó libremente.


► RESULTADOS

La tasa de diagnóstico de TDM definido por el DSM-IV osciló entre 0,3% (6 años) a 0,4% (8 años), subrayando la necesidad, a esta edad, de analizar el TDM continuamente como cuenta de los síntomas.

El análisis de la curva de crecimiento complementario reveló que el TDM disminuyó de los 6 a los 8 años (Mcrecimiento=-0,13 [IC 95%, -0,17 a -0,10]), pero aumentó de los 8 a los 10 años (Mcrecimiento=0,03 [IC 95% 0,00 a 0,06]). Los minutos de AFMV por día no cambiaron de los 6 a los 8 años (Mcrecimiento= -0,17 [IC 95%, -1,35 a 1,01]), pero disminuyó de los 8 a los 10 años (Mcrecimiento=-2,62 [IC 95%, -3,75 a -1,49]).

 

Comentarios

Para ver los comentarios de sus colegas o para expresar su opinión debe ingresar con su cuenta de IntraMed.

AAIP RNBD
Términos y condiciones de uso | Política de privacidad | Todos los derechos reservados | Copyright 1997-2024