El uso de la warfarina para el tratamiento o la prevención del tromboembolismo es cada vez mayor; en la actualidad, más de 1 millón de personas está bajo tratamiento con anticoagulantes. Es posible que los pacientes tratados crónicamente con warfarina necesiten interrumpir su administración para realizar un procedimiento invasivo. Este artículo hace una revisión de la literatura que se ocupa de los riesgos de sangrado de ciertos procedimientos, los riesgos de trombosis de la suspensión de la anticoagulación y de la farmacocinética de la heparina y la warfarina y en él se analizan las recomendaciones acerca de cómo manejar a los pacientes anticoagulados que serán sometidos a un procedimiento invasivo.
*Traducción y resumen objetivo: Dra. Marta Papponetti. Especialista Medicina Interna. Asociación Interdisciplinaria de Medicina Interna