Ley de Salud Reproductiva y anticonceptivos de emergencia

Dos fallos sin precedentes de la justicia Argentina

Polémica por los fallos en contra de la ley de Salud Reproductiva y el uso de un anticonceptivo de emergencia.

Autor/a: Dra. Marisa Geller

El pasado martes 5 de marzo, a tan solo tres días del día internacional de la mujer, en Buenos Aires, una jueza falló contra la Ley de Salud Reproductiva porteña. Esta ley, que rige en la ciudad de Buenos Aires desde junio del 2000, permite proveer información sobre educación sexual a los adolescentes y que los médicos de centros de salud pública puedan prescribirles métodos anticonceptivos en forma gratuita.

El fallo se aplicó solamente sobre los hijos de tres padres abogados que objetaron la ley, alegando que viola sus derechos de patria potestad. Los mismos habían presentado un recurso de amparo un año y medio atrás. La jueza determinó que la ley es "inconstitucional", al menos para esos tres casos.

El objetivo de la ley en cuestión es garantizar el acceso a la información para poder ejercer una sexualidad responsable. También intenta garantizar la atención durante el embarazo, parto y puerperio para así disminuir la morbimortalidad materna e infantil.
Hay que tener presente que esta ley protege principalmente a las mujeres de los sectores sociales con menos recursos. La tasa de mortalidad materna en la Argentina es más alta que en otros países de América latina con menor nivel de desarrollo. El aborto provocado es la primera causa de mortalidad materna. Por año, 55.000 mujeres se internan en hospitales públicos debido a complicaciones relacionadas con abortos inducidos. Estos datos impulsaron a la elaboración de la ley que permite a los médicos recetar anticonceptivos a los adolescentes.

Esta ley es necesaria para que los jóvenes se informen correctamente. La educación y la información son las mejores armas para luchar contra un embarazo no deseado y todas las complicaciones que este trae aparejado tanto en el ámbito médico (mayor morbimortalidad materna e infantil) como en el social (mayor deserción escolar, menor nivel educativo).

La posibilidad de acceder a métodos anticonceptivos también permite disminuir el índice de enfermedades de transmisión sexual. No hay que olvidarse de las estadísticas alarmantes sobre los nuevos casos de SIDA por año. El crecimiento exponencial de esta enfermedad podría disminuir si se pudiera explicar a los adolescentes como evitar el contagio.
Al día siguiente de este fallo tan polémico y ya a dos días del día internacional de la mujer, el miércoles 6 de marzo, la Corte Suprema prohibió la "píldora del día después" por considerarla abortiva. Esta pastilla anticonceptiva, que se toma hasta 72 horas después del acto sexual, es una alternativa válida, especialmente en los adolescentes que suelen tener sexo sin protección y en muchos casos con parejas esporádicas. Este método es un recurso más para evitar un embarazo no planeado y de hecho la Organización Mundial de la Salud recomienda su uso.

La decisión de la corte se basó en la idea de que la vida humana empieza en el momento en que un óvulo y un espermatozoide se unen y forman un embrión y no cuando el embrión ya se implantó en el útero. Esto hace que "la píldora del día después" se considere "abortiva" ya que estaría inhibiendo la implantación de un embrión ya formado. El concepto de aborto que maneja la Corte no es el mismo que el de la Organización Mundial de la Salud, que dice que un aborto es la extracción de un embrión o feto que está dentro de la madre. No se debería, entonces, hablar de aborto cuando la píldora no extrae un embrión que ya está implantado.

Este fármaco fue autorizado el 12 de julio de 1996 por la Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica (ANMAT), que depende del Ministerio de Salud de la Nación. La píldora es utilizada en unos 20 países desarrollados, muchos de los cuales lo incluyen en planes públicos de servicios de salud reproductiva. Pero, el 6 de marzo del 2002, la Corte Suprema de Argentina dictaminó que esta píldora no podrá seguir vendiéndose en el país.

Podríamos decir que la Ley de Salud Reproductiva porteña permite a los adolescentes recibir una educación sexual apropiada y la posibilidad de acceder más fácilmente a métodos anticonceptivos. De esta manera y, junto con la píldora de emergencia, se preserva el derecho de la mujer a concebir cuando ella lo decida y a ejercer una sexualidad plena.