Las sincronías del público en conciertos en vivo ilustran la encarnación de la experiencia musical. Resumen Un estudio de 132 miembros del público de tres conciertos públicos de música clásica (los tres representaron las mismas piezas de música de cámara de Ludwig van Beethoven, Brett Dean y Johannes Brahms) tuvo como objetivo analizar las respuestas fisiológicas y motoras del público. Se suponía que la música induciría fisiología y movimiento sincrónicos en los oyentes (sincronía de inducción). Además de plantear la hipótesis de que tales sincronías estarían presentes, esperábamos que estuvieran relacionadas con las experiencias estéticas de los participantes, su afecto y sus rasgos de personalidad, que fueron evaluados mediante cuestionarios antes y después de los conciertos. Se encontró evidencia clara de sincronía fisiológica (frecuencia cardíaca, frecuencia respiratoria, respuesta de conductancia de la piel), así como sincronía de movimiento de las audiencias, mientras que el comportamiento respiratorio no estaba sincronizado. De este modo, el público de los tres conciertos resonó con la música y su percepción musical quedó plasmada. Había vínculos entre la sincronía corporal y las experiencias estéticas: la sincronía, especialmente la sincronía del ritmo cardíaco, era mayor cuando los oyentes se sentían conmovidos emocionalmente e inspirados por una pieza, y estaban inmersos en la música. Los rasgos de personalidad también se asociaron con las contribuciones individuales a la sincronía de inducción. |
Imagen: Cuestionarios: sala de encuestas, mesas numeradas, formularios de consentimiento por escrito, cuestionarios en iPads. Foto: Phil Dera.
Comentarios
Estudios anteriores han demostrado que la música puede inducir la sincronización en los oyentes, pero los autores de este estudio dijeron que ha habido poca investigación sobre si las audiencias de los conciertos realmente se sincronizan.
Este nuevo estudio, en el que participaron 132 participantes, sugiere que la frecuencia cardíaca, la frecuencia respiratoria y la conductividad eléctrica de la piel (que sugiere excitación) pueden sincronizarse entre los miembros de la audiencia en los conciertos de música clásica.
Los hallazgos se publicaron en la revista Scientific Reports.
Las personas que obtuvieron puntuaciones más altas en rasgos de personalidad como la amabilidad o la franqueza tenían más probabilidades de sincronizarse con otros miembros de la audiencia. Aquellos con rasgos neuróticos o extravertidos tenían menos probabilidades de sincronizarse.
Los investigadores, dirigidos por Wolfgang Tschacher , del Hospital Universitario de Psiquiatría y Psicoterapia, en Berna, Suiza, observaron a las 132 personas mientras escuchaban un concierto en el que un quinteto de cuerda tocaba tres piezas de música clásica. Se trataba del "Op. 104 en do menor" de Ludwig van Beethoven, los "Epitafios" de Brett Dean y el "Op. 111 en sol mayor" de Johannes Brahms.
El equipo de investigación monitoreó el movimiento de los participantes utilizando cámaras aéreas y midió sus respuestas físicas con sensores portátiles.
También pidieron a los participantes que rellenaran cuestionarios sobre su personalidad y estado de ánimo antes y después del concierto.
Si bien los investigadores observaron sincronización en una variedad de medidas, el mayor nivel de sincronización se observó en la frecuencia respiratoria.
Una limitación del estudio es que hubo lagunas en la recopilación de datos debido a que se priorizó la comodidad del usuario sobre la calidad de los datos al elegir los sensores. Se deben desarrollar métodos de recopilación de datos más confiables para estudios futuros, anotaron los autores del estudio en un comunicado de prensa de la revista.
Mensaje final
Una nueva investigación sugiere que una sinfonía podría hacer que los miembros de la audiencia sincronicen su respiración y sus latidos cardíacos mientras escuchan la música.