Una nueva declaración científica de la American Heart Association revisa las estrategias para mejorar la toma de decisiones compartida en el cuidado cardiovascular
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Resumen La toma de decisiones compartida se adopta cada vez más en el cuidado de la salud y se recomienda en las guías cardiovasculares. La participación del paciente en las decisiones de atención médica, la comunicación médico-paciente y los modelos de atención centrada en el paciente son fundamentales para mejorar los resultados de salud y promover la equidad, pero los modelos formales y la evaluación en la atención cardiovascular son incipientes. La toma de decisiones compartida promueve la equidad al involucrar a médicos y pacientes, compartir la mejor evidencia disponible y reconocer las necesidades, valores y experiencias de las personas y sus familias cuando se enfrentan a la tarea de tomar decisiones. El amplio respaldo de la toma de decisiones compartida como un componente crítico de la atención de alta calidad basada en el valor ha aumentado nuestra conciencia, aunque la aceptación en la práctica clínica sigue siendo subóptima para una variedad de problemas de pacientes, médicos y sistemas. Las estrategias efectivas para promover la toma de decisiones compartida incluyen educar a los médicos sobre técnicas de comunicación, involucrar a equipos médicos multidisciplinarios, incorporar entrenadores de decisiones capacitados y usar herramientas (es decir, ayudas para la toma de decisiones del paciente) en niveles apropiados de alfabetización y aritmética para apoyar a los pacientes en sus decisiones cardiovasculares. Esta declaración científica arroja luz sobre el limitado pero creciente cuerpo de evidencia del impacto de la toma de decisiones compartida en los resultados cardiovasculares y el potencial de la toma de decisiones compartida como impulsor de la equidad en salud para que todos tengan oportunidades justas. Las soluciones multinivel deben alinearse para abordar los desafíos en las políticas y el reembolso, el liderazgo y la infraestructura a nivel del sistema, la capacitación de los médicos, el acceso a las ayudas para la toma de decisiones y la participación de los pacientes para apoyar plenamente a los pacientes y a los médicos a participar en el proceso de toma de decisiones compartida y para impulsar la equidad y mejora en los resultados cardiovasculares. |
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Una nueva declaración científica de la American Heart Association destaca la evidencia que respalda la toma de decisiones compartida, un término que describe el proceso de garantizar que los pacientes tengan el conocimiento y las herramientas para tomar decisiones sobre su salud en colaboración con su equipo profesional de atención médica. La declaración se publica en Circulation, la revista insignia revisada por pares de la American Heart Association.
Más de 100 ensayos han demostrado que la toma de decisiones compartida mejora la comprensión, la aceptación y la satisfacción del paciente con su atención médica; sin embargo, los niveles adecuados de toma de decisiones compartida ocurren en tan solo el 10 % de las consultas personales en una variedad de servicios de salud y de especialidades de atención.
La declaración detalla los componentes clave de la toma de decisiones compartida:
- Evidencia claramente comunicada e imparcial sobre riesgos, beneficios y alternativas razonables al tratamiento.
- Experiencia clínica proporcionada de una manera que sea relevante para el paciente.
- Inclusión de los valores, metas y preferencias del paciente en el proceso de decisión.
La declaración presenta modelos de toma de decisiones compartida y formas de medirla en la investigación, además de estrategias para promover su uso. Las posibles soluciones para aumentar la toma de decisiones compartida en la atención cardiovascular incluyen el reembolso de las consultas, la atención en equipo, la integración de las ayudas para la toma de decisiones en los registros electrónicos y la capacitación de los médicos en habilidades de comunicación que apoyen la toma de decisiones compartida de manera más efectiva y sean sensibles a las diferencias culturales, raciales y raciales. consideraciones étnicas, étnicas y de idioma para cada paciente.
Esta declaración fue preparada por el comité del grupo de redacción en nombre del Consejo de Enfermería Cardiovascular y Accidente Cerebrovascular de la Asociación Estadounidense del Corazón; el Consejo de Cardiología Clínica; el Consejo de Calidad de la Atención e Investigación de Resultados; el Consejo de Hipertensión; el Consejo sobre el Riñón en Enfermedades Cardiovasculares; el Consejo sobre Cardiopatías Congénitas de por Vida y Salud Cardíaca en los Jóvenes (Corazones Jóvenes); el Consejo de Estilo de Vida y Salud Cardiometabólica; el Consejo de Enfermedad Vascular Periférica; el Consejo de Epidemiología y Prevención; y el Consejo de Accidentes Cerebrovasculares. Las declaraciones científicas de la American Heart Association promueven una mayor conciencia sobre las enfermedades cardiovasculares y ayudan a facilitar decisiones informadas sobre el cuidado de la salud. Las declaraciones científicas describen lo que se sabe actualmente sobre un tema y qué áreas necesitan investigación adicional. Si bien las declaraciones científicas informan el desarrollo de pautas, no hacen recomendaciones de tratamiento.