Se trata de una paciente de 73 años de edad, natural de Jají (Edo. Mérida) y procedentes de la ciudad de Caracas (Venezuela), consultó por una lesión ulcerosa en la cara, y durante el examen físico se descubre una lesión vulvar que aparentemente era desconocida para la enferma.
En sus antecedentes personales figuran una histerectomía por "fibroma uterino" a los 40 años de edad, bocio diagnosticado hace 20 años y tratado de manera irregular con yodo.
Niega enfermedades venéreas, traumatismos o irritaciones crónicas de la vulva, y tampoco exposición al arsénico. Los antecedentes familiares no eran de importancia.
Examen físico:
Piel blanca senil, con xerosis y daño actínico severo en zonas expuestas. Úlcera irregularmente ovalada de bordes perlados y cubierta parcialmente por costras hemáticas, de 5 cms de diámetro, localizada en la vertiente nasal derecha y párpado inferior del mismo lado, con infiltración de la conjuntiva palpebral.
En la vulva se encuentra una placa eritematopigmentada de forma oval, que mide10 por 5 cms bordes brillantes negrogrisáseos, centro erosionado y escleroso, localizada en la piel del labio mayor izquierdo y se extiende al pliegue entre el labio mayor y menor hasta el introito vaginal y periné.
La biopsia de la lesión de la cara fue reportada como un carcinoma basocelular sólido metatípico, el estudio radiológico de la cara (TAC) no evidenció infiltración tumoral del ojo. Recibió tratamiento con radioterapia con una dosis total de 6.000 cg evolucionando satisfactoriamente.
La biopsia de la lesión vulvar se reportó como un carcinoma basocelular sólido anexial y pigmentado.
Se practicó dermovulvectomía simple extirpando completamente la neoplasia, con un resultado anatómico y funcional adecuado.