Entre la evidencia y la experiencia | 16 JUL 21

El papel múltiple de los bancos de leche materna

Importancia de la leche materna y su disponibilidad en los bancos como una herramienta fundamental en la alimentación de lactantes prematuros.
Autor/a: Pasqua Anna Quitadamo , Giuseppina Palumbo, Liliana Cianti, Paola Lurdo, Maria Assunta Gentile, Antonio Villani International Journal of Pediatrics, vol. 2021, Article ID 6682516
INDICE:  1. Texto principal | 2. Referencias bibliográficas | 3. Texto principal
Texto principal
1. El objetivo

Esta revisión narrativa es un análisis de la literatura y los datos basados en la experiencia sobre el uso de la leche materna para alimentar a los bebés prematuros. Esta revisión en profundidad tiene la meta de aclarar su importancia, con el objetivo final de brindar apoyo en nuestra función como médicos, que es reducir los riesgos y aumentar las oportunidades.

2. La edad de oro de la leche materna

Es una prioridad científica lidiar con la leche materna y los bancos de leche materna, una realidad virtuosa que se está expandiendo por todo el mundo pero que aún es poco conocida.

Hablar de novedades en materia de leche materna parece una situación casi paradójica siendo una entidad que siempre ha existido o, como afirma Bruce German (Director de Alimentación y Salud, Instituto de la Universidad de California), es un súper alimento “ante litteram” y todos aprendemos cosas nuevas todos los días de la leche y que la leche como dieta completa e integral es el producto de 200 millones de años de co evolución simbiótica entre un mamífero y su bebé.

Las herramientas de la ciencia moderna, desde la genómica hasta la antropología molecular, pueden aprovecharse para comprender este notable proceso: conocimientos moleculares desde azúcares hasta oligosacáridos, proteínas hasta péptidos encriptados, estructuras desde glóbulos hasta micelas, células intactas desde células madre hasta células inmunes.

La paradoja radica en el hecho de que, si analizamos los últimos hallazgos científicos sobre la leche materna, la edad de oro del conocimiento sobre la leche materna pertenece a nuestros días. El primer descubrimiento sobre las células madre de la leche materna fue en 2007,1 el proteoma de la leche materna fue mapeado con 261 proteínas nunca antes identificadas en 2009.2 En 2015 se caracterizaron 300 nuevas moléculas de microARN.3

Entonces, la detección del microbioma de la leche, hasta hace poco considerado estéril, tiene una comunidad microbiana específica que tiene una relación de diafonía con el microbioma intestinal que la hace óptima.4-6 Pero más que el sentimiento de sorpresa, Bruce German expresa la vergüenza de toda la comunidad científica con respecto a la “lentitud con la que se adquirió la figura del carácter excepcional de la leche materna”.

Más que una novedad, la definimos como una verdadera revolución de las leyes de la naturaleza, ya que en los últimos 20 años las tecnologías modernas en el campo biológico han cristalizado el concepto de singularidad e irreproducibilidad de la leche materna al establecer tres nuevos principios.3

3. Los nuevos principios de la nutrición infantil

Recordemos que los principios son verdaderos para todos los seres humanos en todo el mundo; son inmutables, indiscutibles. Los valores cambian con el tiempo, pero los principios representan lo que siempre es cierto. Son leyes naturales sobre causas y efectos.

Los tres principios son los siguientes:

1) la leche materna: un medicamento que "salva vidas"

2la leche materna: el mejor alimento para los bebés prematuros

3la leche materna: el componente principal del cuidado del bebé prematuro

Estos principios7-14 han cambiado totalmente el punto de vista y se ha interrumpido la comparación entre los tipos de nutrición por lo que había que demostrar las ventajas de la leche materna con respecto a sus sucedáneos, y más bien hablamos de los riesgos para la vida y salud relacionados con la no utilización de leche materna.15-17 Este último se ha convertido en un problema de salud pública y no solo en una elección de estilo de vida.18

Se entiende que la existencia de sucedáneos de la leche materna es, sin embargo, una oportunidad importante cuando no existen condiciones para la disponibilidad real de leche materna.

Las definiciones también han cambiado: cuando hablamos de leche materna, nos referimos a la leche materna y la leche de banco, que no se oponen. Por el contrario, uno promueve al otro y debe formar parte de un único sistema integrado de elementos orientados al objetivo común de alimentar a todos los bebés prematuros del mundo con leche materna, como elemento salvavidas.19

Las actividades del HMB incluyen el reclutamiento de donantes, la recolección, el transporte, la pasteurización, el almacenamiento, la preparación y la administración de la leche, pero los objetivos del banco de leche son promover y apoyar la cultura de la lactancia materna y las donaciones de leche y proporcionar leche de mujeres a los bebes que se encuentran en UCIN.

Hay pruebas contundentes de que la lactancia materna y la donación se complementan y contribuyen sinérgicamente a mejorar la salud y la supervivencia del niño, 20 mediante la alimentación exclusiva de todos los recién nacidos. Las prácticas de apoyo a la donación de leche son el método más eficaz para proteger, promover y apoyar la lactancia materna.21, 22

La presencia de un banco de leche en la UCIN representa un elemento favorable para la lactancia materna y mejora significativamente tanto la disponibilidad de leche materna para la alimentación del prematuro23-26 como la lactancia materna, con mayores porcentajes de nutrición con la leche materna al alta de la UCIN.26– 29

Esto se comprende fácilmente si se considera que la presencia de un banco de leche en la UCIN da como resultado la activación de métodos estandarizados destinados a aumentar la producción de leche materna; la prestación de apoyo a la lactancia por parte de personal educado y la actitud positiva de un equipo de UCIN con experiencia contribuyen al éxito de la lactancia y la lactancia incluso después del alta del lactante.30

Esta es la experiencia de muchos bancos como el de Madrid,28 donde hubo un mayor consumo de leche materna durante la estancia hospitalaria, y la exposición a la fórmula en los primeros 15 días de vida se redujo del 50% al 16,6 % y una mayor tasa de lactancia materna exclusiva al alta hospitalaria (54% vs 40%).

Esa es también nuestra experiencia26 que compartimos con un documento en el que informamos que se duplicó la porcentajes de alimentación con leche materna de lactantes de muy bajo peso al nacer (MBPN) y en otro artículo muy evocador, 27 en su sencillez, del papel facilitador del banco de leche, donde fue significativa la contribución a la donación de madres que dieron a luz a muy baja edad gestacional o peso muy o extremadamente bajo.

Es significativo que en 5 años de actividad del banco, el 13% del total de la donación provino de madres que dieron a luz prematuramente: alrededor del 40% de este porcentaje se refiere a mujeres que dieron a luz a una edad gestacional extremadamente baja <25 semanas y el 35% a quienes dieron a luz a recién nacidos <500 gramos. Los datos de composición confirman que la leche materna donada por las madres de bebés prematuros es particularmente valiosa, una verdadera joya biológica.

Pero detrás de los números hay personas con sus historias, 31 como una madre que dio a luz a dos gemelos con un peso al nacer <1000 gramos. Ella alimentó a sus hijos exclusivamente con su propia leche durante más de 3 años y donó 100 litros de leche.

> 3.1. Primer principio: la leche materna: un fármaco que "salva vidas"

En las últimas décadas se ha producido una reducción significativa de la mortalidad infantil, que actualmente se estima en 4,5 millones de niños en el primer año de vida y 3 millones (es decir, el 45%) en los primeros 28 días.32

La principal causa de muerte ya no son las infecciones, sino la prematuridad. Muchas de estas muertes se pueden prevenir, y de todos los enfoques conocidos, alimentar a los bebés exclusivamente con leche materna en las primeras horas, días y meses de vida tiene el mayor impacto potencial en supervivencia y desarrollo infantil.33

Hay pruebas contundentes del efecto protector de la leche materna sobre la NEC (enterocolitis necrotizante), 34-45 que es sin duda una de las patologías más importantes del MBPN, no por su incidencia sino porque está agobiada por una alta mortalidad, ya que la mitad de los prematuros con NEC quirúrgica se somete a un resultado o pueden informar problemas graves de funcionalidad gastrointestinal como el síndrome del intestino corto.

Por otro lado, también se ha demostrado que el uso exclusivo de fórmulas para bebés prematuros se asocia con un mayor riesgo de desarrollar NEC en comparación con la leche materna y la leche de banco.46

Esta es también nuestra experiencia como banco de leche que ha eliminado por completo la NEC en nuestra UCIN.39 El efecto protector de la leche materna también representa otras complicaciones relacionadas con la prematuridad 41, 47-49 como sepsis, ROP y DBP, pero con efectos dependientes de la dosis, al igual que un fármaco que salva vidas.

Además, el uso de leche materna se asocia con un mejor resultado neurológico 50 gracias a la acción de neuroprotección y neuromodulación y la mayor sensibilidad de un cerebro prematuro a los efectos beneficiosos de la leche humana en una fase de crecimiento dendrítico y axonal y de sinaptogénesis muy rápida. Las mejores actuaciones, sobre todo cognitivas, corresponden a datos anatómicos documentados por resonancia magnética cerebral.

En el estudio de Deoni y colaboradores51 los niños alimentados con leche humana mostraron un mayor desarrollo de sustancia blanca y una asociación positiva entre la micro estructura de la sustancia blanca en muchas regiones del cerebro y la duración de la lactancia y puntuaciones más altas de lenguaje y visual.

Además, la leche materna extraída en el primer mes de vida ha mostrado claras ventajas neurológicas en términos anatómicos y funcionales.

Se ha demostrado una correlación directa entre el número de días en los que los recién nacidos tomaron leche materna (> 50% de la leche ingerida) en el primer mes de vida y el volumen de sustancia gris al final de la semana 40 después del nacimiento y un mejor nivel de neurodesarrollo a los 7 años de edad en comparación con aquellos que habían tomado menos del 50% de la leche materna total en el primer mes de vida.52

Además, la mayor proporción de sustancia gris en el tálamo y en los ganglios basales de las estructuras centrales en la conectividad cortical y la eficacia de la función neural y el mayor volumen encontrado en el área del hipocampo están bien asociados con el mejor desempeño de las funciones de memoria y aprendizaje. .

En un estudio reciente, 53 los autores investigaron la influencia de la ingesta de leche materna durante la atención neonatal en la UCIN; los lactantes recibieron alimentación exclusiva con leche materna durante ≥75% de los días de atención hospitalaria, y esto se asoció con una mayor conectividad en la conexión ponderada con anisotropía fraccionada (FA), en comparación con el grupo que tuvo <75% de los días recibió alimentación exclusiva con leche materna. Además, el efecto sobre la conectividad estructural y los parámetros de difusión de agua del tracto fue mayor con una exposición ≥90%, lo que sugiere un efecto de dosis.

La leche materna se considera una “inmunonutrición” óptima y la vida temprana está marcando el rumbo correcto para la vida posterior.

Todos estos efectos reconocen en parte una génesis indirecta, ligada a la reducción de la morbilidad del prematuro, pero en gran parte, se deben directamente a los innumerables factores nutricionales y bioactivos de la leche materna. Este tipo de análisis es muy amplio considerando la cantidad y especificidad de los factores, no todos aclarados, contenidos en la leche materna. Solo podemos reportar algunos insumos para expresar la complejidad de este sistema de prevención, nutrición y desarrollo coherente de los lactantes.

Se han identificado más de 1000 tipos de proteínas, presentes constantemente a lo largo de la lactancia, en diversas proporciones, cada una con su propia función que puede cruzarse con las de las demás en un concierto biológico, poco conocido y que juega un papel importante para el desarrollo de la salud.

Por ejemplo, los nucleótidos promueven el crecimiento del sistema inmunológico y mejoran la funcionalidad de la mucosa gastrointestinal, favoreciendo la absorción de hierro y la colonización de bifidobacterias. O bien, los Ácidos grasos poliinsaturados de cadena larga (LCPUFA) tienen una concentración que no cambia durante los 12 meses de lactancia y su biodisponibilidad en la leche materna se ve favorecida por la mayor concentración de L-carnitina, una molécula involucrada en su transporte a través de las membranas mitocondriales.

Además, la leche materna es un lugar privilegiado ya que el estado nutricional de la madre influye relativamente en la composición de la leche, y solo la concentración de las vitaminas parece tener una correlación significativa con la ingesta de vitaminas de la madre.

 

También encontramos este aspecto en un estudio 54 en el que al comparar el entorno clínico-metabólico de las donantes con las características cualitativas y cuantitativas de la leche donada, esta no modificaba sus características nutricionales en presencia de alteraciones clínico-metabólicas en la madre. Es un concepto casi poético, como si el instinto protector materno se expresara también a través de su leche.

Al respecto, nos gustaría mencionar que un estudio piloto encontró que los bebés prematuros expuestos al olor de la leche materna de sus propias madres muestran una disminución persistente en los niveles de cortisol en saliva, que continúa después de terminada la intervención. Este hallazgo puede defender que la exposición al olor de la leche materna de las propias madres tiene un efecto calmante en los bebés prematuros. Los autores sugieren que se necesitan más estudios controlados aleatorios para evaluar esta simple y segura intervención económica.55

La leche materna es una mezcla compleja de nutrientes y compuestos biológicamente activos que, junto con su microbiota y células madre, contribuyen a sus múltiples efectos beneficiosos tanto para la madre como para el niño.

La lista interminable de factores bioactivos de la leche materna incluye factores energéticos: factores hormonales que juegan un papel no solo en el equilibrio energético sino también en el programa metabólico; factores de crecimiento que contribuyen al crecimiento y diferenciación de los tejidos; factores anti infecciosos como una gran cantidad de IgA e IgM secretoras y factores como lisozima, lacto peroxidasa, lactoferrina, lipoproteína lipasa, prebióticos, factor bífido, glicanos, oligosacáridos, ácidos grasos libres y monoglicéridos; otros factores: macrófagos, células T y linfocitos y una amplia variedad de citocinas TNF alfa, IL6, IL8 e interferón gamma.

Incluyamos también las células madre: en un ml de calostro hay 5 millones de células madre que, marcadas en ratones, han demostrado ser absorbidas a nivel gástrico56; después, llegan al intestino, se abren paso a través de los enterocitos y entran en el torrente circulatorio para llegar a todos los órganos y tejidos, donde se diferencian en células adultas, incluidas las nerviosas, 56 logrando atravesar también la barrera hematoencefálica. Su función aún está bajo investigación.

Probablemente, representen un sistema de reparación interno o realicen una función de fortalecimiento y desarrollo de órganos y tejidos, enriqueciendo su kit celular y haciéndolos más resistentes a las enfermedades de la edad adulta.57-61 Por tanto, cuando en la literatura, encontramos que la leche materna puede ser considerada un sistema biológico dinámico en especies específicas; debemos creerlo.

Esto también explica por qué todas las organizaciones que se ocupan de la salud internacional, la OMS, UNICEF, APP y ESPGHAN han publicado las recomendaciones10-12 sobre la alimentación del bebé prematuro. Estos también se han concretado durante la EXPO 2015 que tuvo lugar en Milán y que tuvo como tema la alimentación del planeta (observación final: el primer paso para alimentar al planeta es promover e implementar la lactancia materna y la donación de leche materna).

> 3.2. Segundo principio: Leche materna: el mejor alimento para bebés prematuros.

Fue a partir de ese evento que nació un texto de consenso62 que estableció en el primer punto que todos los prematuros deben recibir leche materna, el segundo que la leche materna debe ser la alimentación principal y en el tercero que si la leche materna no está disponible o en cantidad suficiente, se debe utilizar leche materna de donante pasteurizada obtenida de un banco de leche materna reconocido.

La leche materna humana se identificó como un biofluido mágico desde la antigüedad. En la cultura egipcia, la leche de la mujer se consideraba milagrosa: un líquido capaz de curar enfermedades. Aún hoy, la leche materna es sin duda el mejor alimento para los recién nacidos, ya que es capaz de modularse en función de sus necesidades desde las primeras etapas de la vida, con el fin de asegurar su correcto desarrollo. Por esta razón, también se considera el alimento estándar de oro para lactantes prematuros, también a través de un enriquecimiento apropiado, para ser preferido a la leche de fórmula específica para ellos.

Hemos recordado que, además de los nutrientes clásicos (proteínas, carbohidratos, lípidos, vitaminas y minerales), la leche contiene varios componentes bioactivos, incluidos factores de crecimiento, componentes antimicrobianos y células madre, 56-61 que pueden integrarse en vivo en los tejidos (cerebro, hígado, timo y riñones) del recién nacido y se diferencian en células maduras (por ejemplo, en el cerebro, se transforman en neuronas, astrocitos y oligodendrocitos).

Si reflexionamos que el recién nacido prematuro está creciendo rápidamente, el crecimiento más rápido en la historia del desarrollo del ser humano, este aspecto adquiere un significado especialmente relevante.

Podemos decir que la leche materna fresca es un elemento que salva la vida de los recién nacidos prematuros. La leche fresca de la propia madre es la más indicada porque es la personalizada para cada niño y no ha sido sometida a ningún tratamiento y contiene todos los biofactores útiles para el desarrollo y defensa del propio infante. Se ha demostrado ampliamente el efecto protector de la leche materna fresca sobre las principales complicaciones de la prematuridad.

 

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