La FDA advierte a los médicos sobre el posible riesgo de muerte en pacientes que tienen balones intragástricos llenos de líquido diseñados para promover la pérdida de peso.
Desde la última advertencia de la agencia, cinco pacientes más han muerto. Cuatro de estas muertes se debieron a perforación gástrica de 1 día a 3.5 semanas después de que se colocó el balón. Menos información estaba disponible sobre la quinta fatalidad. Esto eleva el número total de muertes a 12 desde 2016.
Los balones están destinados a ser colocados por un máximo de 6 meses. Los médicos deben advertir a los pacientes sobre las posibles complicaciones, incluida la deflación del balón, la obstrucción gastrointestinal, la ulceración y la perforación gástrica y esofágica. Los pacientes deben ser estrechamente monitorizados durante el tratamiento de la pancreatitis aguda y la hiperinflación espontánea.
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