Entre 2000 y 2010 | 16 JUN 14

Costos de bolsillo de la insulina se duplicaron en EEUU

"Me sorprendió el crecimiento del uso de insulina en los pacientes con diabetes tipo 2", dijo la coautora del estudio.

NUEVA YORK (Reuters Health) - En la primera década de este siglo, cada vez más personas con diabetes tipo 2 en Estados Unidos renovaron las recetas de insulina, y los costos de bolsillo se duplicaron.

Los autores de un nuevo estudio atribuyeron ambas tendencias a la aparición de insulinas nuevas y más costosas, aunque consideraron que ese gasto extra sería innecesario en muchos casos.

"Me sorprendió el crecimiento del uso de insulina en los pacientes con diabetes tipo 2", dijo la coautora del estudio, doctora Kasia J. Lipska, del Departamento de Medicina Interna de la Universidad de Yale, en Connecticut.

Los fármacos para reducir los valores de glucosa en sangre, como la metformina, aumentan la sensibilidad del organismo a la insulina y son la primera opción terapéutica para la diabetes tipo 2, aunque luego puedan recibir indicación de insulina.

Pero esos medicamentos no son una alternativa para las personas con diabetes tipo 1, que necesitan aplicarse insulina porque el organismo no produce la hormona.

El costo promedio por cada receta de insulina entre el 2000 y el 2010 era de entre 19 y 36 dólares, según publica el equipo en una carta de investigación en JAMA.

En esa década, se adoptaron casi universalmente los análogos de la insulina para tratar la diabetes tipo 2 y eso, según indicó Lipska, explicaría el aumento de los costos.

Los análogos de la insulina son una forma molecularmente alterada de la hormona humana y distinta de la insulina humana sintética o animal. Las dosis son más flexibles y más cómodas de utilizar que las de la insulina humana o animal, pero también son más costosas.

"La información sobre los beneficios de los análogos de la insulina versus la insulina humana sintética no es muy convincente en los pacientes con diabetes tipo 2 y son más costosos", dijo Lipska. "Por lo tanto, sorprende el gran cambio en el uso de las insulinas más costosas", añadió.

Con su equipo, utilizó la base de datos de prestaciones privadas, que en el 2010 incluía información sobre 60.000 adultos que recibieron por lo menos un tipo de insulina. El paciente promedio tenía 61 años, era blanco y de las regiones del sur o el oeste de Estados Unidos.

En el 2000, el 96 por ciento de los adultos que se aplicaban insulina utilizaban la versión humana sintética, mientras que en el 2010 lo hacía menos del 15 por ciento.

Para los análogos de la insulina, esos valores eran del 19 por ciento en el 2000 y de más del 90 por ciento en el 2010.

Para Lipska, habría que preguntarse si los análogos de la insulina valen el aumento del gasto de bolsillo.

"Para algunos pacientes, sí. Para todos los pacientes, probablemente no", respondió.

El doctor Geoff Gill, diabetólogo de la Universidad de Liverpool, en Gran Bretaña, no participó del estudio, pero trabaja con dos de los coautores en la Fundación Internacional de Insulina, una ONG pequeña sin fines de lucro que provee insulina a precios accesibles a quienes lo necesitan en el mundo.

Gill consideró que el costo agregado es un problema propio del mundo en desarrollo.

En el 2000, el 10 por ciento de las personas con diabetes tipo 2 renovó una receta de insulina y en el 2010 lo hizo el 15 por ciento. Para Lipska, es difícil decir si esa tendencia es positiva o negativa.

FUENTE: JAMA

 

Comentarios

Para ver los comentarios de sus colegas o para expresar su opinión debe ingresar con su cuenta de IntraMed.

AAIP RNBD
Términos y condiciones de uso | Política de privacidad | Todos los derechos reservados | Copyright 1997-2024