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Panel de expertos de EEUU NO recomienda utilizar terapia hormonal

La Comisión Especial de Servicios Preventivos de Estados Unidos acaba de recomendar preliminarmente que las mujeres posmenopáusicas NO utilicen terapia hormonal para prevenir ciertas enfermedades crónicas.

Por Andrew M. Seaman

NUEVA YORK (Reuters Health) - Una revisión de la literatura revela que las mujeres tratadas con terapia hormonal para prevenir ciertas enfermedades crónicas o aliviar los sofocos enfrentarían una combinación de posibles riesgos y beneficios.

El análisis, publicado en Annals of Internal Medicine, incluye los resultados de nueve estudios que muestran que las usuarias de estrógeno o estrógeno más progestina tenían menos riesgos de sufrir fracturas, pero más posibilidades de desarrollar varias complicaciones, como un accidente cerebrovascular (ACV) o trastornos de la vesícula biliar.

Juntos, el estrógeno y la progestina, también elevaron el riesgo de desarrollar cáncer mamario y demencia, aunque el estrógeno solo estuvo asociado con menos casos de cáncer de pecho.

A partir del nuevo análisis, la Comisión Especial de Servicios Preventivos de Estados Unidos (USPSTF, por su nombre en inglés) acaba de recomendar preliminarmente que las mujeres posmenopáusicas no utilicen terapia hormonal para prevenir ciertas enfermedades crónicas.

La autora principal de la revisión dijo que aunque mucho se ha dicho sobre los posibles riesgos y beneficios de la terapia, el mensaje sobre el uso de hormonas fue confuso.

"Analizamos todo lo que pudimos encontrar sobre el tema y tratamos de que fueran los resultados más sólidos disponibles", explicó la doctora Heidi Nelson, de la Oregon Health & Science University, en Portland.

Según USPSTF, las nuevas recomendaciones surgen de "una certeza moderada a alta de que la terapia no tiene beneficio alguno o de que los daños superan los beneficios".

El equipo de Nelson reunió los estudios en los que al azar las participantes habían utilizado terapia hormonal o un placebo. Hallaron nueve ensayos clínicos publicados desde el 2002.

Cuatro estudios sacaron sus conclusiones de dos ensayos sobre terapia hormonal realizados a la cohorte de Women's Health Initiative, que incluyó un seguimiento a unas 27.000 mujeres. En esos estudios, un grupo tomó estrógeno, otro grupo usó estrógeno más progestina y otros dos grupos recibieron placebo.

Ambos ensayos se suspendieron por el aumento de los efectos adversos de las hormonas.

El equipo observó que las mujeres tratadas con progestina más estrógeno y aquellas tratadas con estrógeno solamente eran un 25-30 por ciento menos propensas que las usuarias de placebo a sufrir una fractura durante los estudios. Eso se tradujo en cinco fracturas menos cada 1.000 mujeres al año.

Pero las usuarias de las hormonas tenían un 34-79 por ciento más posibilidad de tener un ACV, enfermedad de la vesícula biliar o incontinencia urinaria. El estrógeno solo o la combinación con progestina también estuvieron asociados con más casos de demencia "probable".

Y el riesgo de desarrollar cáncer mamario invasivo aumentó un 25 por ciento en el grupo tratado con estrógeno más progestina, comparado con el uso de placebo, pero descendió un 23 por ciento en el grupo tratado sólo con estrógeno.

Por último, la formación de coágulos sanguíneos fue dos veces más común en las usuarias de la terapia combinada que en el grupo tratado con placebo.

El equipo advierte que sus conclusiones surgen sólo de unos pocos ensayos clínicos y que aunque incluyeron a una gran cantidad de mujeres, muchas debieron suspender la terapia durante el estudio. Además, la información estuvo limitada a las mujeres de entre 60 y 69 años.

Las recomendaciones estarán disponibles para su revisión y el comentario público hasta el 26 de junio en el sitio de internet de la USPSTF.

FUENTE: Annals of Internal Medicine, online 28 de mayo del 2012