Por David Douglas
NUEVA YORK (Reuters Health) - El test de simulación de hipoxia en altitud (HAST, por sus siglas en inglés) permite identificar a los pacientes con EPOC que necesitan oxígeno adicional durante un vuelo, aunque no qué cantidad.
La doctora Aina Akero dijo por e-mail que "hay que estudiar a los pacientes que, según las guías, deberían volar con oxígeno suplementario. Nuestro objetivo fue evaluar si podemos utilizar el HAST para determinar la dosis óptima de oxígeno necesaria para viajar en avión".
El segundo objetivo fue conocer si los distintos equipos de oxígeno proporcionaban distintos niveles de presión arterial de oxígeno (PaO2).
El equipo de Akero, del Hospital Ulleval de la Universidad de Oslo, explica que los pasajeros con enfermedad respiratoria pueden desarrollar hipoxemia grave en vuelo debido a la disminución de la presión en la cabina.
El contenido de oxígeno a nivel del mar supera el 20 por ciento, mientras que es de apenas el 15,1 por ciento en un avión, lo que equivale a estar a 2435 metros de altura.
El equipo realizó un estudio cruzado sobre 16 pacientes con EPOC. A todos se les había realizado una pesquisa previa con el HAST: la PaO2 promedio era inferior a los 50 mm Hg.
Los investigadores los expusieron a hipoxia alveolar en una cámara hipobárica y les realizaron el HAST con una máscara. Durante ambos ensayos, recibieron oxígeno suplementario por una cánula nasal por flujo continuo, un dispositivo conservador de oxígeno y un concentrador portátil de oxígeno (CPO).
A cada participante se lo estudió con los tres equipos durante el HAST y la cámara hipobárica, según publica Chest.
La PaO2 en la cámara hipobárica con 2 litros por minuto de oxígeno suplementario vía flujo continuo fue de 8.6 mmHg, comparado con 12,5 mmHg en el HAST. Con el dispositivo conservador de oxígeno, la presión fue de 8,6 mmHg, comparado con 9,7 mmHg en el HAST, mientras que con el CPO fue de 7,7 mmHg, comparado con 8,2 mmHg.
Con el oxígeno suplementario a 1 y 2 litros por minuto, el análisis volumétrico por cánula nasal durante el HAST reveló una acumulación de oxígeno en la máscara y valores falsamente altos de PaO2.
Los ensayos definitivos en la cámara hipobárica "demuestran que el uso de un dispositivo conservador de oxígeno aporta una PaO2 similar que el flujo continuo y, por lo tanto, se prefiere su uso para reducir la cantidad de tanques necesarios durante el vuelo. Un CPO aporta una PaO2 más baja, lo que obligue a aumentar el flujo de oxígeno", agregó Akero.
La autora comentó que el HAST "no se puede utilizar para el análisis volumétrico de la dosis de oxígeno necesaria".
Aun así, el HAST permitió identificar a todos los pacientes que necesitaban oxígeno suplementario durante el vuelo "y en la práctica clínica, el HAST podría funcionar como un test confiable para evaluar si una persona necesita oxígeno adicional durante un vuelo".
FUENTE: Chest, del 2011