Mejor la RMN que la TAC en ACV

Diagnóstico por imágenes

La IRM (imágenes por resonancia magnética) por difusión es mejor en el diagnóstico del accidente cerebrovascular isquémico que la tomografía computarizada, de acuerdo con una nueva directriz emitida por la Academia Estadounidense de Neurología (American Academy of Neurology).

El accidente cerebrovascular isquémico, el tipo de accidente cerebrovascular más común, se debe a la falta de flujo sanguíneo en el cerebro, la mayoría de las veces por un coágulo sanguíneo o a una obstrucción. El tratamiento para revertir el daño causado por un accidente cerebrovascular isquémico se debe administrar a las pocas horas de iniciarse los síntomas, señala la academia en un comunicado de prensa sobre las nuevas directrices.

La IRM por difusión, que mide el movimiento del agua molecular en el tejido, puede indicar dónde está restringida la difusión del agua, por lo que este tipo de análisis revela dónde se ha producido el daño cerebral en pacientes de accidente cerebrovascular. Por el contrario, la TC es más bien un tipo de radiografía especializada.

Para diagnosticar un accidente cerebrovascular isquémico agudo dentro de las 12 horas desde la aparición de los síntomas, la IRM por difusión debería considerarse como un instrumento más útil que la TC, de acuerdo con la nueva directriz, que aparece el 13 de julio en la revista Neurology.