El editorial del mes de Mayo de American Journal of Psychiatry destaca el trabajo sobre depresión y diabetes publicado recientemente en esta misma revista por el Dr. A. Campayo y colaboradores en el Hospital Clínico Universitario de Zaragoza, la Universidad de Zaragoza y el Instituto Aragonés de Ciencias de la Salud. Estos investigadores son miembros del grupo G13 del Centro de Investigación Biomédica en Red en el área de Salud Mental (CIBERSAM), cuyo Investigador Principal es el Dr. Antonio Lobo.
El editorial, publicado en la importante revista de la American Psychiatric Association, destaca el estudio hecho durante el Proyecto ZARADEMP que, realizado en una muestra poblacional de cerca de 5.000 personas mayores de 55 años en la ciudad de Zaragoza, ha documentado el papel de la depresión para aumentar el riesgo de padecer diabetes mellitus en los años subsiguientes.
El firmante del editorial, Prof. K. Lyketsos, del Johns Hopkins Hospital, subraya que “los hallazgos de Zaragoza son importantes por tres motivos”: en primer lugar, confirman el riesgo atribuible a la depresión para causar diabetes en quienes no la padecían, cifrándolo en un 7% aproximado, “lo que indica que la depresión puede explicar una fracción significativa en la aparición de la diabetes”; en segundo, muestra por vez primera que “el riesgo de diabetes se extiende también a las depresiones no graves” y, por último, hay “algunas características específicas de la depresión” que significan un riesgo mayor, concretamente la “depresión persistente” y la “no tratada”.
Tomados en conjunto estos datos, la implicación es que “un tratamiento exitoso de todas las formas de depresión debería disminuir la incidencia de la diabetes a nivel poblacional”. Estos datos destacan aún más la importancia de la depresión como “problema prioritario y fundamental de salud pública”. Considera finalmente que resulta de crítica importancia continuar investigando en los mecanismos por los que la depresión conduce a la diabetes, pensando en factores de tipo psico-social en los pacientes deprimidos (como la falta de ejercicio físico), en factores de tipo biológico (elevación del cortisol, por ejemplo) o la interacción entre ambos tipos de factores.
La depresión aumenta el riesgo de padecer diabetes mellitus
El artículo del Proyecto ZARADEMP publicado en American Journal of Psychiatry, el órgano de la Asociación Americana de Psiquiatría, documenta por primera vez en la bibliografía internacional que “la depresión clínicamente significativa se asocia con un incremento del riesgo (65%) de desarrollar una diabetes mellitus”. Para llegar a esa conclusión, el estudio tuvo que “controlar” otros posibles factores de riesgo de diabetes, como los antecedentes familiares, la obesidad, la hipertensión, el tabaquismo o el consumo excesivo de alcohol. Los participantes en el estudio de base y en “olas” sucesivas de seguimiento eran evaluados en primera fase por estudiantes de Medicina “senior” y “estandarizados (“lay interviewers”) y en la segunda fase los diagnósticos de sospecha, en su caso, eran confirmados por psiquiatras estandarizados.
En apoyo de la hipótesis de partida se pudo documentar que los participantes que en el estudio de base tenían depresión pero no diabetes desarrollaron a los cinco años la diabetes en proporciones significativamente superiores que quienes no estaban deprimidos.
Aunque había informes previos sugerentes de que la depresión pudiera ser factor de riesgo de diabetes, los resultados eran discrepantes y provenían de estudios en que la depresión sólo se documentó mediante tests y cuestionarios. Por el contrario, en este último estudio realizaron los diagnósticos completos psiquiatras de investigación, estandarizados, con lo que los resultados adquieren una clara dimensión clínica. Además, el mismo estudio documenta por vez primera que las depresiones más frecuentes en la población general -las “no-graves” (“non-severe”)-, las depresiones persistentes y las depresiones no tratadas se asocian todas ellas con mayor riesgo de diabetes.
Puesto que las predicciones para las próximas décadas en este grupo de edad, tanto en relación a la diabetes como a la depresión, consideran que ambas van a adquirir proporciones epidémicas y puesto que una alta proporción de estas depresiones no llega a diagnosticarse ni a ser tratada, el estudio subraya que los datos tienen claras implicaciones tanto clínicas como de salud pública.
El trabajo es parte del Proyecto ZARADEMP, que desde hace más de 15 años investiga la salud psíquica y somática o corporal en los mayores de 55 años en la ciudad de Zaragoza. El primer autor del artículo es el Dr. Antonio Campayo, que trabaja en el Servicio de Psiquiatría del Hospital Clínico Universitario de Zaragoza, pertenece al Grupo G13 del CIBERSAM y al Instituto Aragonés de Ciencias de la Salud y es Profesor Colaborador en la Universidad de Zaragoza. El resto del equipo investigador pertenece a las citadas instituciones, así como a los Departamentos de Medicina y Psiquiatría y de Medicina Preventiva y Salud Pública en la citada Universidad.
• El estudio se realizó en una muestra poblacional de cerca de 5.000 personas mayores de 55 años en la ciudad de Zaragoza
• El artículo considera la depresión un “problema prioritario y fundamental de salud pública”
• Destaca la importancia de continuar investigando en los mecanismos por los que la depresión conduce a la diabetes.