Introducción
El trastorno límite de la personalidad (TLP) es una enfermedad de muy difícil tratamiento que se caracteriza por una patrón grave de síntomas psicopatológicos, con inestabilidad de la regulación afectiva, del control de los impulsos y agresión. Varios estudios previos han demostrado el efecto positivo de los antipsicóticos tanto tradicionales como atípicos en pacientes con TLP.
El aripiprazol es un antipsicótico atípico que ha sido utilizado con éxito en el tratamiento de la esquizofrenia, de los trastornos esquizoafectivos y de los trastornos bipolares. Los autores comentan que quizás las características que hacen del aripiprazol una droga de utilidad en el tratamiento de la esquizofrenia y la manía, puedan tener también una influencia positiva en el abordaje de otras enfermedades psiquiátricas como el TLP.
Por ello, el objetivo del trabajo fue realizar un estudio clínico, a doble ciego, controlado con placebo para evaluar la influencia del aripiprazol en los síntomas psicopatológicos multifacéticos y en la agresión en pacientes con TLP.
Métodos
Se incluyeron 57 sujetos con al menos 16 años de edad, que tenían alteración del ánimo, desconfianza, impulsividad y relaciones dificultosas, considerando los criterios del DSM-IV. Se realizaron entrevistas personales con los pacientes y se incluyeron a aquellos que cumplían con los criterios del TLP. Se excluyeron los individuos (n = 5) que presentaban diagnóstico de esquizofrenia, que se encontraban recibiendo aripiprazol u otro antipsicótico, en terapia psicológica, con embarazo en curso, con ideación suicida o con enfermedades somáticas graves.
Se les efectuó una encuesta autoinformada que recabó información sobre síntomas físicos y psicológicos en 9 escalas (SCL-90-R): somatización, obsesión-compulsión, inseguridad en contactos sociales, depresión, ansiedad, agresión, ansiedad fóbica, pensamiento paranoico y pensamiento psicótico. A los pacientes se les administraron, además, otras pruebas: Global Severity Index (GSI), Hamilton Depression Rating Scale (HAM-D), Hamilton Anxiety Rating Scale (HAM-A) y State-Trait Anger Expression Inventory (STAEI).
El cálculo de tamaño de la muestra para un valor de alfa de 0.05 y un poder de 0.80 fue de 26 pacientes en cada grupo. Se aleatorizaron los 52 participantes al grupo tratado con 15 mg de aripiprazol o al grupo placebo. Tanto los sujetos como sus médicos desconocían el tratamiento asignado. Se aplicó la SCL-90-R, la HAM-A, la HAM-D y el STAEI en forma semanal, y luego de 8 semanas se realizó un examen psicológico por última vez. Los datos intermedios no fueron analizados.
Resultados
Las características del grupo aripiprazol fueron: edad de 22.1 ± 3.4 años (grupo placebo: 21.2 ± 4.6 años); el 42.3% tenían una relación significativa con otra persona (grupo placebo: 34.6%); el 26.9% eran albañiles (grupo placebo: 30.8%), el 53.8%, empleados de oficina (grupo placebo: 57.7%) y el 19.2% amas de casa (grupo placebo: 11.5%).
En relación con los antecedentes psicológicos, el 69.2% de los pacientes del grupo aripiprazol habían recibido previamente psicoterapia (grupo placebo: 73.1%), todos habían estado medicados con drogas antipsicóticas y el 38.5% habían sido internados por motivos psiquiátricos (grupo placebo: 42.3%). En ambos grupos, las enfermedades psiquiátricas concomitantes fueron trastorno depresivo, trastorno de ansiedad, trastorno obsesivo-compulsivo y trastorno somatomorfo.
Al inicio del estudio, los hallazgos de las encuestas SCL-90-R, HAM-A, HAM-D y STAEI no fueron estadísticamente diferentes entre los grupos. Al finalizar la investigación, los cambios en los resultados de los pacientes medicados con aripiprazol fueron mayores que los obtenidos en los individuos asignados a placebo en la SCL-90-R (excepto en la somatización), en la HAM-A, en la HAM-D y en el STAEI.
A lo largo del tiempo, el cambio en el puntaje de ansiedad observado en el grupo aripiprazol fue gradual, aquél relacionado con la depresión fue rápido.
Los autores no observaron efectos adversos serios ni informaron intentos de suicidio durante el estudio.
Discusión
Las características sociales, las demográficas, los antecedentes médicos y las enfermedades concomitantes fueron comparables en ambos grupos, así como los resultados de las encuestas aplicadas a los pacientes al inicio del estudio.
Además, el tratamiento con aripiprazol produjo una mejoría mayor que el uso de placebo, especialmente en los aspectos relacionados con la obsesión-compulsión, inseguridad en el contacto social, depresión, ansiedad, agresividad, ansiedad fóbica, pensamiento paranoide y pensamiento psicótico. Estos resultados son coincidentes con los de estudios previos que informaron los efectos antidepresivos y ansiolíticos del aripiprazol. Esta droga fue más efectiva en el tratamiento de los componentes agresivos del trastorno psicopatológico límite.
Los efectos adversos más comunes del aripiprazol son la cefalea, el insomnio, las náuseas, el adormecimiento de una parte del cuerpo, la constipación y la ansiedad. En este trabajo no se informaron cambios importantes respecto de estos efectos no deseados, lo que coincide con lo verificado en un estudio anterior en el que se demostró que el aripiprazol fue una droga segura y bien tolerada.
Los autores señalan que este fármaco parece ser una droga segura y efectiva para mejorar los síntomas del TLP, la calidad de vida y los problemas interpersonales. Sin embargo, aclaran que existen limitaciones como el tamaño de muestra pequeño y el tiempo de seguimiento de 8 semanas que puede disminuir la tasa de falla en la respuesta; además, los efectos del aripiprazol no fueron evaluados en la alteración de las relaciones y, finalmente, no se utilizó la encuesta de Zanarini ya que no estaba traducida al alemán en el momento de realizar el estudio clínico.
Agregan que sería de utilidad realizar investigaciones adicionales para evaluar si estos resultados pueden replicarse y cuánto tiempo duran los beneficios informados.