Por temor a un rebrote de la polio piden dar una dosis extra de Sabin

El caso encendió la alarma sanitaria por el temor a que el virus esté circulando en el país y se lanzó una campaña de vacunación. En el Día Mundial de la Lucha contra la Poliomielitis, las autoridades insisten en que como las vacunas otorgan inmunidad en el 90% de los casos, es necesaria una dosis extra de la Sabin para ampliar la cobertura. Por qué también preocupa el sarampión.

Por Florencia Ballarino

Campaña. Finaliza el 31 de octubre y está destinada a todos los menores de 5 años, si pasó al menos un mes desde que fueron vacunados.

“Una nueva oportunidad para que los niños crezcan sanos”, se puede leer en el afiche de la Campaña Nacional de Vacunación contra el Sarampión y la Poliomielitis que se lanzó el 28 de septiembre. A tres semanas de la puesta en marcha de la iniciativa, y a una de que finalice, sólo el 26% de los chicos argentinos se vacunó. El poco éxito obtenido hasta el momento por la campaña responde a lo que el afiche no dice y hasta algunos pediatras desconocen: todos los niños menores de cinco años deben recibir una dosis extra de la vacuna Sabin oral y de la Doble Viral (sarampión-rubéola), aunque hayan cumplido al pie de la letra con las dosis previstas por el calendario oficial.

La decisión tiene su fundamento en el bajo nivel de cobertura y en la reaparición de casos aislados de ambas enfermedades. En algunas localidades de las provincias de Santiago del Estero, La Pampa y Buenos Aires, la población vacunada no alcanza al 50%, lo que puso en alerta a las autoridades sanitarias ante la posibilidad de un rebrote de estas enfermedades.“El riesgo de un caso de poliomielitis o sarampión en la Argentina existe mientras haya países en los cuales estos virus continúan circulando. Esto requiere mantener coberturas de vacunación superiores al 95% para evitar la posibilidad de contagio a partir de un caso importado”, aseguró Carla Vizzotti, coordinadora del Programa de Inmunizaciones del Ministerio de Salud de la Nación.

Alarma. La poliomielitis es una enfermedad viral que ataca el sistema nervioso. La única forma de prevenirla es aplicando las cinco dosis de la vacuna Sabin o la Salk que indica el calendario. Desde 1970, la Argentina no emprendía una campaña masiva de inmunización ¿Por qué ahora es necesario que los chicos reciban una dosis extra? “En primer lugar porque estaría circulando en el país un poliovirus Sabin derivado tipo 1, esto es una alteración genética del virus contenido en la Sabin”, explicó la infectóloga Angela Gentile, secretaria general de la Sociedad Argentina de Pediatría. Este poliovirus se encontró en mayo en un bebé de un año y tres meses de Villa Mercedes, San Luis. Si bien no se reportaron otros casos fue suficiente para encender la alarma sanitaria (ver recuadro). “La segunda causa es que la eficacia de la vacuna Sabin, luego de tres dosis, es del 90%. Hay un 10% de chicos que están vacunados pero no quedaron inmunizados. Por eso se necesita que todos los papás lleven a sus hijos a vacunar”, remarcó Gentile. Si un niño recibió la Salk (que tiene el virus inactivo), su eficacia alcanza el 98%, pero esta vacuna no otorga inmunidad intestinal. “En el intestino, el virus tiene la capacidad de mutar, se puede volver patógeno. Para que todos los chicos tengan los anticuerpos se da esta dosis extra de Sabin”, aclaró Vizzotti.

Prevención. En el caso del sarampión, cada cuatro años se realiza una campaña de seguimiento para inmunizar a los niños que no recibieron las dosis necesarias o no responden a la vacuna. Como habría 800 mil niños en estas condiciones, el riesgo es alto. Además, tras nueve años sin casos de sarampión en el país, en febrero se confirmó la enfermedad en tres chicos de la ciudad de Buenos Aires. “Fueron casos importados; los niños habían tenido contacto con personas provenientes de Europa, donde había un brote de la enfermedad”, aclaró Vizzotti.

Según las expertas, tanto la Sabin como la Doble Viral son vacunas seguras y aprobadas por la OMS. “Pedimos que los padres lleven a sus hijos a los centros de salud y hospitales a vacunarse ya que es un beneficio para ellos y para toda la población”, exhortó Gentile. La vacunación es gratuita y se extenderá hasta el 31 de octubre. Por cualquier duda se puede llamar al 0-800-222-1002.



La señal de alarma

En mayo y después de 11 años se notificó en el país un caso poliomielitis. Fue a partir de un virus derivado de la vacuna Sabin y afectó a un niño de 15 meses internado en el Garrahan por una enfermedad inmunológica. “La infección no se produjo por la vacuna que había recibido el niño sino por una mutación del virus en su intestino”, explicó María Cecilia Freire, del Laboratorio de Neurovirosis del ANLIS-Malbrán.

La Sabin es una vacuna de virus vivos atenuados, por lo que estos virus continúan circulando a través de las heces de quienes la reciben. En ocasiones, encuentran un instestino suceptible (en pacientes como el chico de San Luis o no inmunizados) para enfermar. Tras la confirmación del caso, se vacunó a todos los menores de 18 años de Perdenera, en San Luis, y de Ituzaingó, donde se había alojado el chico en Bs. As. “Seguimos con la vigilancia epidemiológica, pero no detectamos otro caso”, indicó Freire.