Mientras los mercados mundiales de cannabis, cocaína y opiáceos se achican cada vez más, el incremento del consumo de estimulantes sintéticos es motivo de preocupación para la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito, Unodc.
Así lo expresa la ONU en el Informe Mundial sobre las Drogas 2009, publicado ayer con nuevas pruebas de que los cultivos para la producción de drogas como el opio y la cocaína han disminuido.
La reducción es generalizada en el consumo de opiáceos, incluso el estudio revela que Colombia disminuyó un 18 por ciento sus cultivos de amapola y un 28 por ciento en la producción de cocaína. Pese a esto sigue en el primer lugar en ambos rangos.
Mientras en Colombia se nota la reducción en la producción en Europa Occidental, América del Norte y Oceanía, el consumo de cannabis entre los jóvenes también parece estar disminuyendo, según lo indica el informe.
Así mismo, los datos relativos a la región de mayor consumo de cocaína en el mundo, E.U., muestran una reducción, en tanto que el mercado de Europa parece estar estable.
Los informes de países tradicionalmente consumidores de opio en Asia sudoriental también indican que el consumo de esta droga podría estar disminuyendo allí.
Lo preocupante
En cambio, hay distintas indicaciones en el sentido de que el problema relativo a los estimulantes de tipo anfetamínico a nivel mundial está empeorando.
Según el informe, las incautaciones mundiales están aumentando y se están fabricando estimulantes en un número creciente de países, en lugares y con técnicas diversas.
Se están traficando cada vez con mayor frecuencia a América Central y del Sur precursores de metanfetamina con el objeto de fabricar estimulantes destinados a América del Norte", dice la Unodc.