Medidas sanitarias sobre 5 patologías

Bs As trabaja para prevenir las enfermedades de verano

El Ministerio de Salud de la provincia de Buenos Aires constituyó una Comisión para la Prevención de Enfermedades de Verano.

Fuente: Infobae

El objetivo es monitorear y prevenir la evolución de distintas patologías que en esta época del año, asociadas a las altas temperaturas, derivan en un fuerte aumento de casos.

Dengue, fiebre amarilla, diarrea, hantavirus y leptospirosis son las cinco enfermedades que tendrán su pico de casos anuales durante el verano. De hecho, en el caso del hantavirus, una mujer de 27 años falleció por esta causa la semana pasada en La Plata y un joven albañil de 24 años se encuentra internado en estado crítico aparentemente afectado por la misma enfermedad.

No obstante, según explicó el director de Epidemiología del Ministerio de Salud provincial, Mario Masana Wilson, la Comisión también abordará temas como accidentes viales y enfermedades sexuales como HIV y sífilis.

En el marco de la Comisión se realizarán a partir de la primera semana de diciembre una serie de reuniones con renombrados especialistas sanitarios del ámbito público y privado. "Se trata de una serie de reuniones con especialistas de reconocida trayectoria. Cada grupo trabajará con una enfermedad con el objetivo de monitorear la evolución de los casos para saber dónde apuntar las estrategias de prevención con mayor eficacia”.

La coordinación de la Comisión está en manos de Masana Wilson, el director provincial de Medicina Preventiva, Alejandro Costa, y la coordinadora del Programa Materno-Infantil de la cartera sanitaria, Flavia Raineri.

La Comisión fue creada la semana pasada tras una reunión que el ministro de Salud, Claudio Zin, mantuvo con los funcionarios a los que instruyó para organizar estas reuniones ante el aumento de casos de enfermedades de verano que ya comienza a registrarse.

En el caso puntual de la diarrea, se apuntará a la creación de nuevas “unidades centinelas” en hospitales provinciales en el marco del Programa de Vigilancia Epidemiológica del Ministerio de Salud nacional. En la provincia, estas unidades funcionan en el Hospital Especializado Materno Infantil Victorio “Tetamanti” de Mar del Plata; y en el Hospital Zonal Especializado Materno Infatil “Argentina Diego” de Azul.

Se trata de centros ocupados específicamente de investigar la etiología de las bacterias y virus que producen diarrea para perfeccionar el diagnóstico. “La idea es tener un centro en cada una de las doce regiones sanitarias de la provincia”, indicó Masana Wilson.

Las cinco enfermedades

LEPTOSPIROSIS: Se trata de una enfermedad infecciosa producida por una bacteria llamada leptospira y se transmite de los animales al hombre. La enfermedad se adquiere cuando el hombre entra en contacto con cualquier objeto, superficie, o con el agua y alimentos que contengan orina de los roedores infectados, el principal vector de la enfermedad. La leptospira, que es la bacteria que la provoca, penetra por la piel o por las mucosas, por ejemplo la boca o la nariz.

Los primeros signos de leptospirosis aparecen generalmente una semana después de producido el contagio y se manifiesta con fiebre alta que aparece de forma repentina, dolores de cabeza y dolores musculares. La enfermedad puede desencadenar otras patologías como meningitis, neumonía y miocarditis, incluso, en los casos más graves.

Según datos de la Dirección de Epidemiología del Ministerio de Salud, se produjeron 15 casos de leptospirosis en lo que va del año, mientras que en todo el 2007 la cifra alcanzó los 60 casos.

HANTAVIRUS: La aparición de un nuevo caso fatal -y otro posible- en la región de La Plata volvió a encender la alerta entre las autoridades sanitarias. Al igual que la leptospirosis, el hantavirus es una enfermedad que se contrae a través de los roedores. Las altas temperaturas favorecen la presencia del denominado ratón colilargo (olygorisomiz flabescens), el vector más común del hantavirus.

Hasta octubre, la Dirección de Epidemiología del Ministerio de Salud provincial tenía registrados apenas 4 casos de hantavirus, mientras que durante todo 2007 el número alcanzó los 20 casos.

El contagio de hantavirus no se produce por el ataque o el contacto directo con estos roedores, sino básicamente por inhalación, es decir, cuando se respira en un lugar donde hay excrementos, orina o saliva de un roedor infectado, porque esas deyecciones de los ratones eliminan partículas del virus hanta. Los síntomas son similares a los de una gripe, con fiebre, decaimiento, dolores de cabeza, cefalea, tos y vómitos.

Del mismo modo que con la leptospirosis, para prevenir la enfermedad debe evitarse entrar en contacto con la orina de los animales, combatir las ratas, evitar la acumulación de basura, utilizar guantes y botas para desratizar, no bañarse en las aguas que pudieran estar contaminadas y evitar transitar por lugares donde hay barro porque es probable que allí haya orina de roedores.

DIARREA: Durante los meses de verano se multiplican los gérmenes y bacterias por lo que entre diciembre y enero se produce el pico máximo de casos de esta enfermedad que causa anualmente la muerte de miles de niños en todo el mundo.

El año pasado se registraron en hospitales y centros de salud pública un total de 232.000 casos mientras que a la fecha se llevan notificados 210.700 y se estima que a fin de año se alcanzará una cifra similar a la de 2007.

De los casos totales notificados este año, un 45,47% (95.800) correspondió al segmento de chicos menores de cuatro años: el dato da cuenta de que son los niños más pequeños quienes constituyen la población más vulnerable ante diarreas.

Por sí sola, una diarrea común –muchas veces acompañada por vómitos- genera la pérdida de líquidos y sales por lo que se recomienda no seguir una dieta estricta porque puede complicar aún más el cuadro de deshidratación. En ese sentido, el nuevo paradigma médico para combatir la diarrea sostiene la necesidad de que los niños afectados continúen con su alimentación normal, aunque de modo fraccionado.

FIEBRE AMARILLA: Durante 60 años no hubo casos autóctonos en el país, pero el verano pasado, en Misiones, se registraron 8 casos de fiebre amarilla en humanos. Según informó el director de Epidemiología del Ministerio de Salud, Mario Masana Wilson, en octubre pasado se encontraron varios monos muertos en esta provincia mesopotámica lo que marca la pauta de que “ya está circulando el virus en nuestro país y del lado brasileño”.

Por ello, la vacunación contra esta enfermedad se recomienda a toda persona que tenga previsto viajar a las zonas endémicas del norte argentino y países como Brasil.

DENGUE: La reciente detección de unos 1.800 focos de mosquitos portadores de dengue en Río de Janeiro, Brasil, amenaza con un rebrote de la enfermedad a partir de la proliferación del mosquito aedes aegyptis, vector del dengue.

Durante el verano, la conjunción de altas temperaturas y precipitaciones abundantes ofrece condiciones ideales para el desarrollo de este mosquito. En su versión menos virulenta (dengue clásico), esta enfermedad viral se manifiesta en el hombre con fiebre alta y fuertes dolores corporales. En su manifestación más peligrosa, por reinfección, genera fiebre hemorrágica y suele ser letal.

Lo que ocurra en los países limítrofes es seguido de cerca por las autoridades sanitarias argentinas. Es que la enorme mayoría de los argentinos infectados por dengue en los últimos años han contraído la enfermedad en esas latitudes o bien los vecinos, que trabajan en Argentina, han ingresado la enfermedad al regresar de sus países de origen.

En la provincia de Buenos Aires más del 90 por ciento de las personas infectadas residían en distritos del conurbano bonaerense, donde el intercambio con los países fronterizos es permanente.

Según datos de la Dirección de Epidemiología del Ministerio de Salud provincial, en los primeros seis meses de 2007 se notificaron 139 casos (105 casos comprobados y 34 sospechosos) mientras que entre octubre de ese año y agosto de 2008 se detectaron 30 casos (5 comprobados y 25 sospechosos).