Médicos de la Universidad de Cincinnati (Estados Unidos) revelan que altas cantidades de neutrófilos en los pulmones de pacientes afectados por la fibrosis pulmonar idiopática se asocian a un mayor riesgo de muerte.
Según su estudio, publicado en "Chest", las concentraciones elevadas de dichas células incrementan el riesgo de mortalidad en el primer año tras el diagnóstico en un 30%.
Según los autores, medir la cantidad de células en los pulmones de estos pacientes en el momento del diagnóstico permitiría a los médicos determinar el riesgo que tienen de morir en el plazo de un año, incluso teniendo en cuenta otras medidas bien conocidas relacionadas con la enfermedad, como son la edad, el consumo de tabaco y la función pulmonar.
Se estima que la fibrosis pulmonar idiopática afecta en Estados Unidos a unas 128.000 personas, con una cifra de nuevos casos anuales que llega a 48.000. Por el momento no existe ningún tratamiento que haya demostrado ser eficaz para esta enfermedad.
Los investigadores de Cincinnati descubrieron la relación entre los neutrófilos y el riesgo de mortalidad utilizando lavado broncoalveolar, estudiando a 156 pacientes recién diagnosticados de fibrosis pulmonar idiopática.