La contaminación podría empeorar el estado de los pacientes cardíacos al afectar a los vasos sanguíneos y a la coagulación, según estudio de la Universidad de Edimburgo (Reino Unido) y la Universidad de Umea (Suecia) que se publica en "The New England Journal of Medicine".
La investigación muestra que la inhalación del humo que sale de los tubos de escape de diesel provoca cambios en la actividad eléctrica del corazón, lo que sugiere que la polución atmosférica reduce la cantidad de oxígeno accesible al corazón durante el ejercicio.
Según los autores, "este estudio proporciona una explicación sobre por qué los pacientes con enfermedad cardíaca son más propensos a ingresar en el hospital los días en los que los niveles de aire contaminado aumentan. La mayoría de las personas tienden a pensar que la polución atmosférica tiene efectos sobre los pulmones pero, como el estudio muestra, también puede tener un importante impacto sobre las funciones cardíacas".
Los investigadores analizaron a 20 varones que habían experimentado un infarto de miocardio previo y los expusieron durante una hora a aire filtrado o a tubos de escape diesel diluidos, mientras que montaban de forma intermitente en una bicicleta estática. La función cardíaca se controló continuamente y los análisis de sangre se realizaron 6 horas después.
La monitorización eléctrica del corazón mostró que la inhalación del humo del tubo de escape diesel multiplicó por tres el estrés del corazón durante el ejercicio. Además, la capacidad del organismo para liberar t-PA, proteína que evita que se formen coágulos sanguíneos, también se redujo en más de una tercera parte después de la exposición.
La relación entre la contaminación y la enfermedad cardíaca es muy fuerte en el caso de las partículas finas de los tubos de escape producidas por el tráfico rodado. Los investigadores están especialmente interesados en los motores diesel, ya que generan entre 10 y 100 veces más partículas contaminantes que los motores de gasolina. El número de automóviles diesel está creciendo en Europa y otras partes del mundo.
"Debido a los beneficios del ejercicio para la salud cardíaca seguiremos alentando a los pacientes cardíacos a realizar ejercicio de forma regular, pero preferiblemente no cuando existe mucho tráfico local alrededor. Los pacientes cardíacos pueden ver los niveles de contaminación en sus predicciones climatológicas locales", recomiendan los autores.
New England Journal of Medicine 2007;357:1075-1082