Introducción
La fibrilación auricular (FA) constituye el principal factor de riesgo de enfermedad tromboembólica y de causa de accidente cerebrovascular. La prevalencia es del 1% en la población general, pero asciende al 5% en los adultos mayores de 65 años. Es importante tener en cuenta que:
· El diagnóstico de FA es simple mediante el registro del pulso y corroborado por el electrocardiograma (ECG).
· Las secuelas graves, entre ellas el accidente cerebrovascular, se pueden reducir dramáticamente con tratamiento anticoagulante.
Por lo tanto la FA reúne los criterios que justifican la detección sistemática de esta arritmia.
El estudio Screening for Atrial Fibrillation in the Elderly (SAFE), que los autores analizan en este trabajo investiga si la detección sistemática de la FA es más eficaz que la detección lograda a través de un examen clínico de rutina.
Métodos
Diseño del estudio. Se trata de un estudio multicéntrico de tipo aleatorio y limitado a una determinada población. Los participantes que tenían 65 años o más fueron distribuidos en un grupo que fue sometido a detección sistemática de la FA mediante registro del pulso y ECG (grupo sistemático) y otro grupo que recibió un examen clínico de rutina con registro sistemático del pulso y recomendación de realizar un ECG ante la detección de un pulso irregular (grupo oportunista). Se agregó un tercer grupo llamado control constituido por individuos de 65 o más años que recibieron un examen clínico de rutina sin que al médico se le enfatizara el registro del pulso del paciente.
El criterio de valoración principal fue el número de nuevos casos de FA detectados durante los 12 meses del período de estudio.
Resultados
En el grupo sistemático ingresaron 4562 pacientes y se detectaron 74 casos de FA (1,62%), en el grupo oportunista participaron 4575 pacientes y se detectaron 75 casos de FA (1,64%) y en el grupo control participaron 4513 pacientes y se detectaron 47 casos de FA (1,04%). Se observó una diferencia significativa entre el grupo control y los otros dos grupos, pero no hubo diferencia entre el grupo sistemático y el oportunista. En los pacientes mayores de 75 años la tasa aumentó en ambos grupos manteniendo la diferencia estadística (Figura 1).
Figura 1. Porcentaje de detección de FA en el grupo control y en el grupo oportunista. Se destaca que entre las mujeres no hubo diferencias dentro del espectro de los 65-74 años. En esta figura solamente se incluyó el grupo oportunista ya que tanto éste como el grupo sistemático dieron resultados prácticamente similares.
Discusión
En este estudio multicéntrico, los autores trataron de identificar el mejor método para detectar la FA durante la visita médica en pacientes mayores de 65 años. El examen clínico con registro manual del pulso y la recomendación al paciente y en la historia clínica de realizar un ECG ante la sospecha por el examen semiológico de una FA, fue tan eficaz para detectar esta arritmia como el estudio sistemático de realizar un ECG a todos los pacientes examinados. Ambos métodos fueron más eficaces que la visita médica de rutina. En otros términos, no es necesario realizar en forma sistemática un ECG para detectar FA cuando el médico controló adecuadamente el pulso radial del paciente. De todas maneras, la tasa de FA es probablemente más alta que la registrada en cada grupo, debido al bajo registro de episodios de FA paroxística, además en el ingreso se excluyeron los pacientes con antecedentes de FA o con FA al momento del estudio, lo que hace que la tasa de FA en una población mayor de 65 años se acerque al 5% como se mencionó al principio.