La enfermedad de Chagas se estima que afecta a más de dos millones de personas en nuestro país. Esta cifra es el resultado de factores sociales que aumentan el riesgo del contagio y de largos períodos en los que estuvo ausente la prevención. Además, la atención de los enfermos presenta dificultades especiales, ya que muchas veces no se detecta el contagio a tiempo y, además, porque han sido escasos los avances farmacológicos en esta materia, en buena medida por desinterés comercial.
En este contexto, resulta alentador el avance logrado por un equipo científico del Instituto de Investigaciones en Ingeniería Genética y Biología Molecular, del Conicet, que alcanzó a diseñar un nuevo tratamiento para el mal de Chagas y un test de diagnóstico. El logro se alcanzó luego de más de dos décadas de trabajo, lapso durante el cual diferentes instituciones públicas del país y del extranjero subsidiaron la labor científica. La terapia es similar a la diálisis y elimina los anticuerpos dañinos para el corazón, y su eficacia fue probada en laboratorio pero todavía debe realizar por protocolos de investigación con pacientes —lo cual se hará en Río de Janeiro. También deberá obtener la autorización sanitaria correspondiente.
En la actualidad sólo hay dos medicamentos aprobados para contrarrestar al parásito del Chagas, los cuales generan muchos efectos adversos. También es considerable el nivel de mortalidad de este mal: cincuenta mil personas por año en todo el mundo. Por estas razones, el desarrollo del equipo científico argentino ha sido recibido con mucha expectativa y esperanza.
El Chagas afecta sobre todo a poblaciones pobres y muchas personas desconocen su infección. Junto, entonces, a la implementación de los nuevos desarrollos, sigue siendo prioritario prevenir y asistir a la población en riesgo.
Un equipo científico nacional logró un importante avance para combatir al mal de Chagas, una enfermedad que tiene dos millones de afectados en el país. Deberán darse los pasos necesarios para implementar este logro y, además, reforzar la prevención.