Estudio realizado en Argentina | 04 OCT 06

¿Cómo perciben las madres de niños de jardín de infantes a sus hijos con sobrepeso?

El objetivo de este estudio fue determinar, la asociación entre sobrepeso y sexo y la percepción de las madres acerca del sobrepeso de sus hijos.
Autor/a: Valeria Hirschler, C. Gonzalez, G. Cemente, S. Talgham, H. Petticnichio y M. Jadzinsky 
INDICE:  1. Desarrollo | 2. Desarrollo
Desarrollo

Resumen:

Material y Método: 321(160 Masc) niños (edad 4.39 + 0.83 años), de jardín de infantes fueron evaluados. Se clasificaron a los niños con riesgo de sobrepeso o con sobrepeso cuando el IMC > 85 o > 95 percentilo respectivamente. Se realizaron  cuestionarios  escritos sobre la percepción de las madres de los hábitos alimentarios y de la imagen corporal de los niños.

Resultados: La prevalencia de niños con riesgo de sobrepeso y con sobrepeso fue de 19% y 18.4% respectivamente. Hubo una diferencia (P<0.001) en la proporción de madres con distorsión de la percepción de la imagen corporal y hábitos alimentarios de niños normopeso versus a las madres de niños con riesgo de sobrepeso o sobrepeso. En el análisis de regresión múltiple tomando el IMC>95 percentilo como variable dependiente mostró que la percepción materna sobre la imagen y hábitos alimentarios (OR: 4.5; 95%CI, 2.5-7.8 p<0.0001) fueron factores de riesgo independientes y significativos para el sobrepeso ajustados por edad y sexo. La concordancia entre la percepción sobre la imagen corporal y los hábitos alimentarios vs. el IMC> 95 percentilo fue pobre; Kappa 0.31+0.07; 95% IC, 0.17-0.44 para la imagen corporal y 0.14+0.06 95% IC, 0.02-0.27 para los hábitos alimentarios.

Conclusiones Esto sugiere que la percepción de las madres sobre la imagen y hábitos alimentarios es un predictor de sobrepeso.

Introducción:

La obesidad está asociada con un incremento de riesgo de enfermedad cardiovascular  y concomitante muerte  (1). La prevalencia de sobrepeso en la infancia, una enfermedad multisistémica con consecuencias potencialmente desvastadoras (2), ha aumentado en forma epidémica en estas ultimas 2 décadas. Los niños con sobrepeso tienen más riesgo de ser adultos obesos (3). Por todas estas razones, la intervención a fin de prevenir la obesidad debería comenzar en forma temprana, si fuera posible desde el nacimiento. Este trabajo estudió la habilidad que tienen los padres para detectar la obesidad en sus hijos en la temprana edad de jardín de infantes.

Las madres son buenas mediadoras para la prevención del  sobrepeso en niños de jardín de infantes ya que ellas juegan un papel importante en la realización del plan alimentario  (4) y los patrones de actividad física de los niños a esta edad (5).
Para los pediatras que trabajan con niños de jardín de infantes, sería muy difícil trabajar con las madres en la prevención de la obesidad sin primero entender como perciben las madres el problema del sobrepeso en sus hijos.
En el mundo occidental el IMC normalmente disminuye a los 2 años y vuelve a aumentar a los 6 años, esto es lo que normalmente se denomina rebote adipositario. Definimos  como la edad del rebote adipositario, a la edad en la cual el IMC es más bajo, es decir entre el año de vida y los 12 años (6). Los niños con un rebote adipositario temprano tienden a asociarse con una baja ganancia de peso durante la infancia y con un incremento mayor del IMC en la adolescencia, incrementando así el riesgo de diabetes tipo 2 (7).  Por lo tanto factores ambientales en la infancia temprana, podrían estar relacionados con la adecuada regulación de la ingesta energética y con el mayor riesgo de obesidad en la adolescencia y la edad adulta (7). 
El objetivo de este estudio fue determinar la asociación entre el sobrepeso y: la  edad, el sexo, y la percepción por las madres del sobrepeso de sus hijos.

 



Población, Material y Métodos

Este fue un estudio transversal de 321 madres de niños (160 masculinos) de 2 a 6 años de edad (Edad media 4.39 +/-0.83 años  DS) de 3 jardines de infantes del área programática del Hospital Durand. Los niños fueron examinados entre abril y agosto de 2004.
Fueron incluídos todos los niños de estos 3 jardines de infantes. Si bien el criterio de exclusión fue la presencia de una patología crónica, ningún niño fue excluído ya que en estos 3 jardines no hallamos niños con patología crónica. A aquellos niños cuyas madres eran analfabetas (dos) se realizó el cuestionario en forma oral por la misma pediatra.
La edad, sexo, talla y estadío de Tanner (8,9) fue registrado. Los niños pertenecían a un nivel socioeconómico medio y bajo.
El peso fue medido con un error de 0.1kg en una balanza de pesas, los niños usaban sólo ropa liviana y sin zapatos.

El IMC fue calculado con la siguiente fórmula: Peso en Kg. dividido por la talla en metros al cuadrado. La talla fue medida con un error de 0.1cm con un metro de pared. 
Los niños con normopeso fueron definidos cuando presentaban un IMC <85 percentilo, los que tenían riesgo de sobrepeso cuando presentaban un IMC entre el percentilo 85 y  94% y sobrepeso cuando el IMC era > 95 percentilo  (10) respectivamente, según el  Centers for Disease Control growth charts de niños de  USA.  El IMC z-score (IMC-z) fue también determinado. Los niños con sobrepeso fueron clasificados además, con sobrepeso severo cuando el IMC-z  era > 2.5

Se realizaron  cuestionarios escritos sobre la percepción de los hábitos alimentarios de los niños para las madres es decir (come mucho, bien, poco o muy poco) y además sobre la imagen corporal (lo ve muy gordo, gordo, normal o flaco).
En el análisis sobre la  percepción materna acerca del peso del niño, de las 4 respuestas posibles: muy gordo, gordo, normal o flaco fueron colapsados en 2 categorías. Las madres que contestaban “muy gordo o gordo”  fueron clasificadas como madres que creían que sus hijos tenían riesgo de presentar sobrepeso o que presentaban sobrepeso. Aquellas madres que seleccionaban ”normal o flaco” fueron clasificadas como madres que creían que sus hijos no presentaban riesgo de tener sobrepeso o de presentar sobrepeso. En el análisis sobre los hábitos alimentarios las 4 respuestas fueron colapsadas nuevamente en 2 categorías. Las madres que seleccionaban ” mucho” fueron clasificadas como “percepción” de hijos con riesgo de sobrepeso o sobrepeso, y las que seleccionaban “bien, poco o muy poco” fueron clasificadas como “no percepción”.

Los percentilos de los IMC de los niños fueron comparados con las respuestas de las madres. Determinamos la relación entre los siguientes predictores : la percepción de la madre acerca de la imagen corporal y de los hábitos alimentarios de sus hijos y el reconocimiento por las mismas del sobrepeso.
Este trabajo fue aprobado por el comité de ética del Hospital Durand de Buenos Aires. Cada padre firmó un consentimiento informado  luego de explicarle las características del estudio y antes de comenzar el estudio.



Analisis Estadístico

El test de Chi cuadrado fue utilizado para comparar proporciones. La concordancia entre la percepción de la imagen corporal y los hábitos alimentarios versus los registros médicos IMC > 95 percentilo fue determinado por el índice Kappa. La regresión logística múltiple fue realizada para examinar la relación entre  el IMC >95percentilo  como variable dependiente y otras variables como edad, sexo, imagen corporal y hábitos alimentarios como variables independientes. El valor P < 0.05 fue considerado estadísticamente significativo.  Los datos fueron expresados como media± DS. El  análisis fue realizado usando el paquete software estadístico SPSS10.0 e InfoStat

Resultados

Se evaluaron 321 niños (160 masc.) 19% (n=61) presentaban riesgo de presentar sobrepeso y 18.4% (n=59) presentaban sobrepeso. Once sujetos (3.4%) presentaban obesidad severa (BMI-Z>2.5). El z IMC medio fue de 0.6 + 1.1 (rango -3.4 a +5.0). Los valores medios de los hallazgos clínicos se encuentran en la Tabla 1. No hubo diferencia significativa en la prevalencia de niños con riesgo de sobrepeso y con sobrepeso entre varones y mujeres.
Hubo  una diferencia significativa en la prevalencia de distorsión de la percepción de la imagen corporal entre las madres de niños con normopeso y aquellas madres cuyos hijos presentaban riesgo de sobrepeso o sobrepeso (17% vs 87.5%, respectivamente P<0.001)
Entre las 59 madres con niños con sobrepeso, el 23.7% (n=14) creían que su niño realmente presentaba  sobrepeso, y sólo el  1.6 % (n=1) de 61 madres de niños con riesgo de presentar sobrepeso consideraban que el riesgo de sobrepeso era real en estos.
Cuarenta y cinco % (n=5) de las madres de niños (n=11) con sobrepeso severo z-IMC> 2.5 consideraron que su peso era normal
Hubo una diferencia significativa en la distorsión de la  percepción de la ingesta de los niños entre las madres de niños con normopeso y aquellas cuyos hijos presentaban riesgo de sobrepeso o sobrepeso(36.3% vs 90.8% respectivamente P<0.001) (Figura 2).
Si bien las madres con niños con sobrepeso presentaron una distorsión significativamente mayor sobre la percepción de los hábitos alimentarios, vale la pena remarcar que más de 1/3 (36%) de las madres de niños con sobrepeso presentaron distorsionada esta percepción. Ochenta y cuatro % (n=50) y 96.7% (n= 59) de 59 madres de niños con sobrepeso y 61 con riesgo de sobrepeso respectivamente pensaban que comían adecuadamente o poco.  Setenta y dos % (n=8) de 11 madres de niños con sobrepeso severo sostuvieron que comían adecuadamente.

En el análisis de regresión múltiple, considerando  al IMC >95 percentilo como variable dependiente mostró que la percepción materna tanto de la imagen corporal como de los hábitos alimentarios (OR: 4.5; 95%

 

Comentarios

Para ver los comentarios de sus colegas o para expresar su opinión debe ingresar con su cuenta de IntraMed.

CONTENIDOS RELACIONADOS
AAIP RNBD
Términos y condiciones de uso | Política de privacidad | Todos los derechos reservados | Copyright 1997-2024