Un 70 por ciento de los casos de espina bífida puede evitarse tomando suplementos de ácido fólico durante las primeras fases del embarazo, según se desprende de un análisis de la Dra. Laura Mitchell, del Centro Universitario de Ciencias de la Salud de Texas (EE.UU.) publicado en la última edición de la revista The Lancet.
La espina bífida es el resultado de un fallo en la fusión del tubo neural, y es una de las malformaciones más comunes de la estructura humana. Las causas de este defecto de desarrollo son varias, incluyendo anormalidades en los cromosomas y fallos genéticos. En la mayoría de los casos no se conoce la causa.
El mecanismo que subyace a este efecto protector del ácido fólico se desconoce, pero según los expertos probablemente incluya a genes que regulan el metabolismo y el transporte de folatos. Según la Dra. Mitchell, la espina bífida es el único defecto de nacimiento en el que existen tremendos avances para su prevención y tratamiento.
Para la experta, "los continuos avances en el genoma humano proporcionan nueva información para entender esta malformación y los tratamientos intrautero, aún no testados, podrían mejorar la calidad de vida de los individuos que nazcan con espina bífida".
Puede solicitarnos el texto completo de este artículo en su versión pdf: The Lancet Vol 364 November 20, 2004.