Las enfermedades intersticiales del pulmón (EIP) son un grupo muy amplio y heterogéneo de enfermedades que se caracterizan por comprometer difusamente el parénquima pulmonar afectando predominantemente al intersticio. El intersticio pulmonar está constituido por una trama de fibras de tejido conectivo que le proporciona un adecuado sostén a la estructura pulmonar. Se distribuye en tres compartimentos:
-El espacio intersticial broncovascular o axial. Es una vaina de tejido conectivo alrededor de los vasos y bronquios.
-El espacio intersticial parenquimatoso o acinar. Se ubica entre las membranas basales alveolar y capilar en la zona del intercambio gaseoso. Este pequeño espacio contiene fibras elásticas y de colágeno, así como macrófagos alveolares, fibroblastos y miofibroblastos.
-Por último, el espacio intersticial subpleural. Ubicado por debajo de la pleura visceral, envuelve a todo el pulmón y penetra en el mismo a través de los septos interlobulares.
Se describen más de 200 EIP.(1) Algunas son muy agresivas, generalmente progresan y ocasionan la muerte en pocos años como por ejemplo la fibrosis pulmonar idiopática (FPI). Otras en cambio, tienen mejor pronóstico y un porcentaje variable de pacientes curan o mejoran como ocurre con la sarcoidosis.
Las enfermedades granulomatosas afectan predominantemente el espacio intersticial broncovascular. Por el contrario, la FPI, la fibrosis asociada a enfermedades del colágeno, la asbestosis, etc, comprometen el espacio intersticial acinar.(2) En la mayoría de los casos estas enfermedades ofrecen dificultades para confirmar el diagnóstico. Por tal motivo decidimos hacer esta investigación con el objetivo de determinar la incidencia y etiología de la EIP en un centro especializado y conocer la estrategia empleada para llegar al diagnóstico.
Material y métodos:
Se revisaron retrospectivamente las historias clínicas (HC) de los pacientes que consultaron por primera vez al servicio de consulta externa de nuestro hospital, durante el período 2 de enero de 1999 al 30 de diciembre de 2000. Se seleccionaron las que cumplían con uno o más de los criterios básicos aceptados para el diagnóstico de EIP, (3-4) a saber: disnea de causa inexplicada, infiltrado intersticial difuso, patrón restrictivo e hipoxemia en reposo y/o ejercicio.
Se evaluó exhaustivamente cada método de diagnóstico empleado, clasificándolos en métodos no invasivos: HC, radiografía de tórax, tomografía axial computada de tórax de alta resolución (TACAR), pruebas de laboratorio y de función pulmonar y métodos invasivos: lavado broncoalveolar (LBA), biopsia transbronquial (BTB) y biopsia quirúrgica (BQ).
Los pacientes con sospecha o diagnóstico de EIP fueron derivados por su médico clínico, neumonólogo o consultaron en forma espontánea en nuestro hospital.
Las EIP fueron divididas en dos grupos:
1- EIP con diagnóstico específico: definidas como aquellas que por métodos invasivos y / o no invasivos se pudo llegar a un diagnóstico específico.
2- EIP sin diagnóstico específico: el análisis de los procedimientos realizados no permitió llegar a un diagnóstico específico.