Clasificación de ataques

Trombofilia congénitas en ataque isquémico y sus subtipos patogénicos

La relación entre ataque isquémico agudo sin precedentes y las trombofilias congénitas, tendría más probabilidades de ser coincidental que de ser causal en casi todos los casos, independientemente del subtipo patogénico del ataque isquémico.

A pesar de que son varias las trombofilias congénitas que podrían ser factor de riesgo causal para un cierto porcentaje de ataques isquémicos, pocos estudios han evaluado esta asociación o la relación entre la trombofilia y los subtipos patogénicos del ataque. Un estudio realizado por investigadores australianos de la ciudad de Perth, se propuso arrojar luz sobre estas cuestiones.

El grupo investigador condujo un estudio de caso control de 219 casos hospitalarios con ataque isquémico sin precendentes y 205 sujetos de control seleccionados azarosamente.
Todos los participantes fueron estratificados por edad, sexo y código postal. Con el uso de los criterios establecidos, los casos de ataques fueron clasificados por subtipo patogénico de manera ciega. Asimismo, la prevalencia de factores de riesgo vascular convencionales; los niveles en plasma resistentes de la proteína C, proteína S, antitrombina III;  y los exámenes genéticos para el factor Leiden V y la mutación 20210A de la protrombina fueron determinados en los casos y en los controles.

Los resultados evidenciaron que la prevalencia de alguna trombofilia fue del 14.7% (95% CI, 9.9% a19.5%) entre los casos y del 11.7% (95% CI, 7.4% a 17.0%) entre los sujetos de control (OR, 1.3; 95% CI, 0.7% a  2.3%).  La prevalencia de trombofilias individuales entre los casos osciló entre el 0.9% (95% CI, 0.1% a 3.4%) para deficiencia de proteína S y el 5.2% (95% CI, 0.3% a 9.1%) para la deficiencia de antitrombina III. Entre los sujetos de control, la prevalencia osciló entre el 1.0% (95% CI, 0.1% a 3.6%) para la deficiencia de la proteína S y el 4.1% (95% CI, 0.2% a 7.8%)  para la deficiencia de la antitrombina III. Finalmente, no existieron diferencias significativas en la prevalencia de trombofilia entre los casos y los sujetos de control o entre los subtipos patogénicos de ataques isquémicos.  
A partir de los datos relevados, los investigadores australianos concluyeron que 1 de cada 7 pacientes con ataque isquémico agudo sin precedentes resultará positivo para una de las trombofilias congénitas. Sin embargo, la relación tiene más probabilidades de ser coincidental que de ser causal en casi todos los casos,  independientemente del subtipo patogénico del ataque isquémico. Estos resultados sugieren que los exámenes de rutina para trombofilia en la mayoría de los pacientes con ataque isquémico agudo podría ser innecesarios. Si las trombofilias aún podría ser importantes en pacientes jóvenes con ataque isquémico o en la predicción de complicaciones (ej. trombosis venosa) o consecuencias de los ataques permanece sin ser elucidado.