El amor romántico y el cerebro

El amor es ciego, dice el refrán, y gracias a un estudio australiano, pionero en el mundo, ahora estamos un paso más cerca de comprender por qué.

Amor romántico y sistema de activación conductual Sensibilidad hacia un ser querido

Resumen

La investigación sobre los mecanismos que contribuyen al amor romántico está en su infancia. El sistema de activación conductual (BAS) es un sistema biopsicológico que se ha demostrado que desempeña un papel en varios resultados motivacionales. Hasta donde sabemos, ningún estudio ha investigado el papel que puede desempeñar el BAS en el amor romántico. Utilizando una conceptualización biológica del amor romántico, desarrollamos un medio para evaluar la sensibilidad BAS hacia un ser querido y evaluar su asociación con la intensidad del amor romántico. El resultado es la formulación de una nueva forma de evaluar un sistema biopsicológico que puede contribuir a la expresión del amor romántico.

Este estudio fue el primero en investigar el amor romántico y el sistema de activación conductual. En el estudio 1, la escala del sistema de activación conductual: sensibilidad hacia un ser querido (BAS-SLO) se validó en una muestra de 1556 adultos jóvenes en pareja que experimentaban un amor romántico. En el estudio 2, se utilizó la regresión lineal jerárquica para identificar las asociaciones de la escala BAS-SLO con la intensidad del amor romántico en una submuestra de 812 adultos jóvenes en pareja que experimentaron amor romántico durante dos años o menos. La Escala BAS-SLO explicó el 8,89% de la varianza en la intensidad del amor romántico. Sujeta a validaciones y pruebas adicionales, la escala BAS-SLO puede ser útil en futuros estudios psicológicos y de neuroimagen. Los hallazgos se consideran en términos de los mecanismos y la historia evolutiva del amor romántico.

Comentarios

Es bien sabido que el amor romántico cambia el cerebro, liberando la llamada hormona del amor oxitocina, responsable de la euforia que sentimos al enamorarnos. Ahora, investigadores de la ANU, la Universidad de Canberra y la Universidad de Australia del Sur han medido cómo una parte del cerebro es responsable de poner a nuestro ser querido en un pedestal en esa primera oleada de romance.

En el primer estudio del mundo que investiga el vínculo entre el sistema de activación conductual (BAS) del cerebro humano y el amor romántico, los investigadores encuestaron a 1.556 adultos jóvenes que se identificaron como "enamorados". Las preguntas de la encuesta se centraron en la reacción emocional hacia su pareja, su comportamiento en torno a ellos y el enfoque que pusieron en su ser querido por encima de todo.

Resulta que cuando estamos enamorados, nuestro cerebro reacciona de manera diferente. Hace que el objeto de nuestros afectos sea el centro de nuestras vidas.

El investigador principal de la ANU y estudiante de doctorado, Adam Bode, dice que el estudio, publicado en la revista Behavioral Sciences, arroja luz sobre los mecanismos que causan el amor romántico. "En realidad sabemos muy poco sobre la evolución del amor romántico", dice Bode. Como resultado, cada hallazgo que nos informa sobre la evolución del amor romántico es una pieza importante del rompecabezas que acaba de comenzar".