¿Son mejores los hombres o las mujeres para "leer la mente" de los demás?

Diferencias de sexo y edad en la “teoría de la mente” en 57 países utilizando la versión en inglés de la prueba “Leer la mente en los ojos”

La “Teoría de la mente” (ToM) es la capacidad de atribuir estados mentales a uno mismo y a los demás, para dar sentido al comportamiento humano y predecirlo.

Desde la década de 1980, la ToM se ha vuelto central para el estudio del desarrollo humano, particularmente el desarrollo de la percepción social y la cognición social, y para comprender condiciones clínicas como el autismo, los trastornos de conducta, los trastornos de la personalidad, la anorexia y la esquizofrenia. La ToM también es un foco central de la investigación en psicología comparada, que aborda la cuestión de si la ToM es exclusiva de los humanos, de la investigación en neuropsicología, que aborda cómo las lesiones cerebrales afectan la ToM, y de la neurociencia social, que prueba la factores biológicos y sociales que influyen en la ToM.

Existe evidencia de que la ToM sigue patrones de desarrollo consistentes durante la infancia, con una progresión a través de diferentes etapas. Aunque se debaten los precursores de la ToM en la infancia, algunos sugieren que los precursores de la ToM son evidentes entre los 9 y los 15 meses de edad en conductas de atención conjunta como seguir la mirada, mostrar conductas y gestos como señalar para compartir intereses (“señalamiento protodeclarativo”). Es notable que los niños autistas en el momento más temprano en que pueden ser diagnosticados muestren retrasos o déficits tanto en la atención conjunta como en el juego de simulación, y en hitos posteriores del desarrollo de la ToM.

Resumen

La prueba “Leer la mente en los ojos” (Prueba de los ojos) es una evaluación de la “teoría de la mente” ampliamente utilizada. Los criterios de dominio de investigación del NIMH lo recomiendan como una de las dos pruebas para "comprender los estados mentales". Estudios anteriores han demostrado una ventaja femenina promedio en la prueba. Sin embargo, se desconoce si esta ventaja femenina existe a lo largo de la vida y en un gran número de países.

Por lo tanto, probamos las diferencias de sexo y edad utilizando la versión en inglés del Eyes Test en adolescentes y adultos de 57 países. También probamos asociaciones con factores sociodemográficos y cognitivos/de personalidad. Aprovechamos un conjunto de datos de descubrimiento (N=305 726) y tres conjuntos de datos de validación (Ns = 642; 5284; y 1087).