American Heart Association Sesiones científicas 2022

Sesiones científicas de la American Heart Association 2022, Resumen 19590

Evaluación personalizada para el dolor de pecho eficaz, puede eliminar pruebas innecesarias

Para las personas con dolor torácico estable, un enfoque personalizado de pruebas de "precisión" condujo a evaluaciones más eficientes del riesgo de enfermedad cardíaca y mejoró el diagnóstico y el tratamiento de la enfermedad de las arterias coronarias en comparación con la atención habitual, según un informe reciente presentado en las Sesiones Científicas 2022 de la American Heart Association.

El dolor de pecho es una razón común por la que las personas visitan al médico y, aunque se descubre que la mayoría de los episodios de dolor de pecho no están relacionados con el corazón, es el signo más común de posibles problemas cardíacos. El dolor torácico “estable” significa que alguien no ha sido diagnosticado con una enfermedad cardíaca pero tiene dolor torácico debido al esfuerzo físico o emocional. Las guías de la American Heart Association y el American College of Cardiology para evaluar el dolor torácico indican la importancia de identificar a las personas con bajo riesgo de enfermedad cardíaca para que puedan evitar pruebas innecesarias, que pueden implicar mayores costos y posibles riesgos o complicaciones. Sin embargo, no existe un ensayo aleatorio que detalle específicamente las pruebas y los exámenes de detección más apropiados para las personas que tienen dolor de pecho estable para determinar si tienen una enfermedad cardíaca.

Este estudio tuvo como objetivo determinar si un enfoque de precisión para evaluar a las personas con dolor torácico estable mejoró la eficiencia con respecto a las evaluaciones habituales y si se evitaron las pruebas innecesarias, y si se mejoró la atención sin poner a los pacientes en riesgo de no diagnosticar una enfermedad cardíaca.

“El estudio PRECISE proporciona la primera evidencia aleatoria de una estrategia de prueba basada en el riesgo para reducir las pruebas adicionales y mejorar la eficiencia de la atención mientras se mantienen excelentes resultados para los pacientes, como el uso de medicamentos indicados en las pautas, la reducción del dolor torácico y la minimización de la cantidad de ataques cardíacos o muertes relacionadas con enfermedades cardíacas”, dijo la autora principal del estudio, Pamela S. Douglas, MD, FAHA, profesora Ursula Geller de Investigación en Enfermedades Cardiovasculares en la Facultad de Medicina de la Universidad de Duke y miembro del Instituto de Investigación Clínica de Duke en Durham, Carolina del Norte.

El estudio incluyó a 2103 adultos en 65 centros ambulatorios en los EE. UU., Canadá y Europa. Todos los participantes tenían síntomas que indicaban una posible enfermedad de las arterias coronarias: el 83 % informó dolor en el pecho como síntoma principal , el 10 % informó dificultad para respirar al hacer ejercicio físico y un pequeño porcentaje de personas informó otros síntomas preocupantes, como náuseas o mareos. La mitad de los participantes del estudio eran mujeres y la edad media del grupo era de 58 años. Los participantes fueron asignados al azar a uno de dos grupos: una estrategia de evaluación de precisión (1057 personas) o pruebas habituales (1046 personas).

La estrategia de evaluación de precisión comenzó con una evaluación llamada Estudio PROspectivo Multicéntrico de Imágenes para la Evaluación de la Puntuación de Riesgo Mínimo del dolor torácico (PROMISE MRS o PMRS), diseñada para identificar a las personas de bajo riesgo que pueden no beneficiarse de más pruebas. El PMRS se basa en los factores de riesgo cardiovascular de una persona, como el tabaquismo, la diabetes, los niveles anormales de colesterol, los antecedentes familiares de enfermedades cardíacas y la presión arterial alta, así como el sexo del paciente. Un PMRS alto indicaba un riesgo bajo de futuros ataques cardíacos, por lo que, según la hipótesis del estudio, las pruebas podrían posponerse a menos que los síntomas persistieran o empeoraran.

Los participantes en la estrategia de precisión que obtuvieron una puntuación más baja, lo que significa un mayor riesgo de enfermedad cardíaca, fueron remitidos para una angiografía por tomografía computarizada (TC) coronaria con TC de reserva de flujo fraccional selectiva (FFRCT). La angiografía por TC coronaria es una prueba de diagnóstico no invasiva que produce imágenes tridimensionales de las arterias del corazón para determinar si hay obstrucciones que puedan indicar una enfermedad de las arterias coronarias. FFRCT evalúa el flujo sanguíneo con más detalle cuando las arterias coronarias se estrechan. Se alentó a todos los participantes, independientemente de la aleatorización o las pruebas iniciales, a recibir la atención recomendada por las guías, incluidos medicamentos preventivos, como medicamentos para reducir el colesterol y medicamentos antiplaquetarios.