Un estudio de cohorte retrospectivo basado en la población

Síncope y el riesgo de un posterior accidente automovilístico

No se registró un aumento del riesgo de accidentes

Autor/a: John A. Staples, Shannon Erdelyi, Ketki Merchant, et al.

Fuente: Syncope and the Risk of Subsequent Motor Vehicle Crash

Puntos clave

Pregunta  

¿El primer episodio de síncope está asociado con un mayor riesgo de accidentes automovilísticos subsiguientes?

Hallazgos  

Este estudio de cohorte observacional retrospectivo basado en la población examinó a 9223 pacientes que visitaron el departamento de emergencias (ED) por un primer episodio de síncope y 34 366 pacientes de control emparejados que visitaron el ED por una condición diferente al síncope.

Los investigadores encontraron que el riesgo de accidente automovilístico durante el año siguiente era similar en ambos grupos.

Significado  

En contraste con los resultados de estudios previos, estos hallazgos sugieren que pueden no ser necesarias restricciones de conducción más estrictas después del síncope.


Importancia  

Las restricciones médicas a la conducción son onerosas, pero la recurrencia del síncope mientras se conduce puede provocar un accidente automovilístico (MVC). Pocos datos empíricos informan las restricciones de conducción actuales después del síncope.

Objetivo  

Examinar el riesgo de MVC entre los pacientes que visitan el servicio de urgencias (SU) después del primer episodio de síncope.

Diseño, ámbito y participantes  

Se realizó un estudio de cohorte observacional retrospectivo basado en la población sobre el riesgo de MVC después del primer episodio de síncope en Columbia Británica, Canadá. Los pacientes que visitaron cualquiera de los 6 SU urbanos por síncope y colapso fueron emparejados por edad y sexo con 4 pacientes de control que visitaron el mismo SU en el mismo mes por una afección distinta al síncope.

Los registros médicos del servicio de urgencias de los pacientes se vincularon con registros de salud administrativos, historial de manejo e informes detallados de accidentes. Luego se comparó la supervivencia libre de accidentes entre las personas con síncope con la de los pacientes de control emparejados. Los análisis de datos se realizaron desde mayo de 2020 hasta marzo de 2022.

Exposiciones  

Visita inicial al servicio de urgencias por síncope.

Principales resultados y medidas  

Participación como conductor en un MVC en el año siguiente a la visita índice al ED. Los accidentes se identificaron utilizando datos de reclamos de seguros e informes policiales de accidentes.

Resultados  

La cohorte del estudio incluyó a 43 589 pacientes (9223 pacientes con síncope y 34 366 controles; mediana [RIC] de edad, 54 [35-72] años; 22 360 [51,3 %] mujeres; 5033 [11,5 %] residentes rurales).

Al inicio del estudio, las tasas brutas de incidencia de MVC entre los grupos de síncope y de control fueron más altas que entre la población general (12,2, 13,2 y 8,2 accidentes por 100 años-conductor, respectivamente).

En el año siguiente a la visita índice al SU, ocurrieron 846 primeros accidentes en el grupo de síncope y 3457 primeros accidentes en el grupo de control, lo que indica que no hubo diferencias significativas en el riesgo de MVC posterior (9,2 % frente a 10,1 %; índice de riesgo ajustado [aHR], 0,93; IC del 95 %, 0,87-1,01, P = .07).

El riesgo de accidentes posteriores entre los pacientes con síncope no aumentó significativamente en los primeros 30 días después de la visita al servicio de urgencias índice (aHR, 1,07; IC del 95 %, 0,84-1,36; P  = 0,56) o entre los subgrupos con mayor riesgo de eventos adversos después del síncope (ej., edad >65 años, síncope cardiogénico, puntuación de riesgo de síncope canadiense ≥1).

Conclusiones y relevancia  

Los hallazgos de este estudio de cohorte retrospectivo basado en la población sugieren que los pacientes que visitan el servicio de urgencias con un primer episodio de síncope presentan un riesgo de accidente posterior similar al del paciente promedio del servicio de urgencias. Es posible que no se justifiquen restricciones de conducción más estrictas después del síncope.