El tamoxifeno ofrece beneficios a largo plazo en la prevención del cáncer de mama en mujeres con un alto riesgo de padecer la enfermedad, según dos ensayos clínicos dirigidos en Londres (Reino Unido) por el Wolfson Institute of Preventive Medicine y el Royal Marsden Hospital respectivamente. Las conclusiones de ambos estudios, que muestran que la reducción en el riesgo de cáncer de mama persiste mucho tiempo después de que las mujeres dejen de tomar el fármaco, se publican en la revista “Journal of the National Cancer Institute”.
Tamoxifeno es utilizado tanto para tratar el cáncer de mama como para prevención entre las mujeres que tienen un alto riesgo de padecerlo. Sin embargo, la mayoría de los datos sobre el fármaco para la prevención de la enfermedad proceden del período de cinco años en el que la paciente aún seguía tomándolo. Tamoxifeno, un fármaco antiestrógenos, sólo se activa en el cáncer de mama positivo para el receptor de estrógenos, que depende de los estrógenos para crecer.
En el ensayo IBIS-I (International Breast Cancer Intervention Study) participaron 7.145 mujeres de entre 35 y 70 años con un riesgo elevado de cáncer de mama a las que se asignó de forma aleatoria a recibir 20 miligramos por día de tamoxifeno o placebo durante cinco años. Los resultados del estudio inicial que se hicieron públicos en el año 2002 mostraron que el tamoxifeno reducía la incidencia del cáncer de mama un 32%. La reducción del riesgo sólo se producía en el caso de los tumores positivos para el receptor del estrógeno.
En la actualización del primer estudio que ahora se publica, los resultados han mostrado que el tamoxifeno reducía la incidencia del cáncer de mama un 27% a los ocho años en las mujeres que participaban en el IBIS-I con una menor presencia de efectos secundarios después de detener el tratamiento a los cinco años.
Según este estudio dirigido por el Wolfson Institute of Preventive Medicine in London (Reino Unido) los resultados suponen una confirmación más de que tamoxifeno reduce el riesgo de los tumores de mama positivos para los receptores de estrógeno en las mujeres bajo un mayor riesgo. Además, proporciona la primera evidencia de que los beneficios del fármaco se extienden más allá del período de tratamiento aunque sus efectos secundarios no.
El segundo estudio, dirigido por el Royal Marsden Hospital de Londres, realizó un seguimiento de 20 años de 2.471 mujeres que tomaron durante ocho años tamoxifeno o placebo. En un análisis inicial en 1998, los investigadores informaron que no existían diferencias entre ambos grupos en la incidencia del cáncer cuando estudiaron datos de seis años de seguimiento.
Tras dos décadas de seguimiento, en su análisis actual los investigadores han observado que la incidencia global del cáncer de mama invasivo seguía siendo similar entre ambos grupos pero al examinar los cánceres positivos para los receptores de estrógeno han descubierto que tamoxifeno redujo el riesgo de estos tumores un 39%. Esta reducción se produjo en gran medida en la última parte del período de seguimiento.
Journal of the National Cancer Institute 2007;99:272-282,283-290