Podrían prevenir el 80 % de los ataques cardiacos

Adoptar cinco conductas saludables

Los hombres que siguen cinco directrices reducen su riesgo de forma dramática, afirman unos investigadores.

Fuente: Medlineplus

Cinco conductas de salud recomendadas podrían prevenir cuatro de cada cinco ataques cardiacos en los hombres, sugiere un estudio reciente.

Los hombres de mediana edad y mayores fueron mucho menos propensos a tener un ataque cardiaco durante un promedio de once años si bebían con moderación, no fumaban y hacían todo lo correcto en las áreas de la dieta, el ejercicio y el peso, halló el estudio.

Apenas alrededor del 1 por ciento de los hombres que participaron en el estudio encajaban en esta categoría de vida ultra saludable. Pero tenían un 86 por ciento menos de probabilidades de sufrir ataques cardiacos que los que comían mal, tenían sobrepeso, hacían poco ejercicio, fumaban y bebían demasiado alcohol, señalaron los investigadores.

Los hombres más sanos podrían al final morir de un ataque cardiaco de cualquier forma, por supuesto, y el estudio no dijo que si vivieron más tiempo que los demás.

Pero "hay mucho que ganar y se ahorra mucho dinero si las personas tienen un estilo de vida más saludable", aseguró la autora líder del estudio, Agneta Akesson, profesora asociada del Instituto de Medicina Ambiental del Instituto Karolinska en Solna, Suecia.

El equipo de Akesson deseaba obtener información sobre el efecto combinado de los distintos aspectos de una vida saludable. Pocos estudios han examinado el impacto general de esta forma, aseguró Akesson.

Para el estudio, que aparece en la edición del 22 de septiembre de la revista Journal of the American College of Cardiology, los investigadores examinaron los expedientes médicos y las encuestas de más de 20,700 hombres suecos que tenían entre 45 y 79 años en 1997. En ese momento, no tenían antecedentes de cáncer, enfermedad cardiaca, diabetes, hipertensión ni colesterol alto. Los investigadores les dieron seguimiento hasta 2009 para ver cómo les iba.

El ocho por ciento de los hombres (1,724) no practicaban ninguna de las cinco conductas saludables, y de ese grupo 166 terminaron sufriendo ataques cardiacos.

Del 1 por ciento de los hombres (212) que practicaban las cinco conductas saludables, apenas tres sufrieron ataques cardiacos.

Según sus hallazgos, los investigadores concluyeron que en conjunto las cinco conductas saludables podrían prevenir el 79 por ciento de los primeros ataques cardiacos en los hombres.

Además, cada conducta por sí misma reducía el riesgo de ataque cardiaco. Por ejemplo, comer una dieta rica en alimentos beneficiosos como las frutas, las verduras, los frutos secos, los productos lácteos bajos en grasa y los granos integrales se asoció con un riesgo casi un 20 por ciento más bajo en comparación con los que no practicaban ninguna de las conductas saludables, halló el estudio.

El estudio tiene algunas limitaciones. No observa cuánto tiempo vivieron los hombres. Tampoco ofrece información sobre las minorías étnicas, dado que la mayoría de los hombres del estudio eran blancos.

En cuanto a las mujeres, Akesson es coautora de un estudio anterior que sugirió que la vida saludable tiene un efecto similar en ellas.

Akesson dijo que el estudio sugiere que los hombres deben buscar cambiar su conducta en las cinco áreas analizadas en el estudio. Pueden comer mejor, perder peso, hacer ejercicio (los hombres más sanos montaban bicicleta o caminaban al menos 40 minutos al día), dejar de fumar y beber solo con moderación, lo que se definió en alrededor de una copa al día.

Un experto dijo que los hallazgos son un buen recordatorio de que los beneficios de las conductas saludables se acumulan.

"Las personas que buscan una pastilla mágica o una nueva tecnología moderna para prevenir el ataque cardiaco deben acordarse de lo importante que son los factores del estilo de vida", comentó el Dr. R. Curtis Ellison, profesor de medicina y salud pública de la Facultad de Medicina de la Universidad de Boston.

Ellison alabó el estudio y añadió que los hombres no deben despreocuparse sobre el riesgo de ataque cardiaco en una era de grandes avances médicos. "Ahora es poco común que las personas mueran de un primer ataque cardiaco. Pero es más probable que esas personas tengan futuros problemas del corazón", advirtió.

"Prevenir el primer ataque cardiaco conduce a más años con salud y a menos riesgo de discapacidad a medida que la persona envejece", planteó Ellison.


FUENTES: Agneta Akesson, Ph.D., associate professor and senior lecturer, Nutritional Epidemiology, Institute of Environmental Medicine, Karolinska Institute, Solna, Sweden; R. Curtis Ellison, M.D., professor, medicine and public health, Boston University School of Medicine; Boston, Mass.; Sept. 22, 2014, Journal of the American College of Cardiology.