Dicen que es una nueva forma de atraer al público femenino. Autoridades médicas alertan sobre los riesgos y afirman que es grave que se mezcle la salud con lo festivo.
Por: Graciela Gioberchio
Con el auge del bisturí y el sueño del cuerpo perfecto, una nueva moda comienza a extenderse en el país: en San Juan, La Rioja, Córdoba y ahora también en Buenos Aires, los boliches bailables ofrecen "lolas nuevas" para la mujer que lo desee. ¿Cómo? Con la entrada a la fiesta se sortea una cirugía estética "y no participan menores de 18 años", repiten los organizadores mientras terminan de delinear lo que llaman "una buena idea que atrae público". Los polémicos premios ya generaron críticas y preocupan a las autoridades médicas.
A fines del año pasado se rifó un par de implantes mamarios en San Juan, en la megafiesta temática "Quiero mis lolas" -sus organizadores dicen que patentaron el nombre- que incluyó desfiles de modelos, promoción de productos de belleza y gran revuelo. Al cierre de esta edición, la disco Aqua de La Rioja prometía sortear con la entrada ($30) una cirugía estética, y el 8 de noviembre se hará otra fiesta, también bajo el slogan "Quiero mis lolas", en la disco Amnesia de esa ciudad.
Alarmado con la novedad, el Consejo Médico de La Rioja citó al cirujano plástico a cargo de la operación, Rafael Fernández, al comité de ética. "Es grave que se mezcle la salud con lo festivo", afirmaron en el Consejo.
Pero la tendencia no para. Este fin de semana el boliche Sunset, de Olivos, se subió a la movida y comenzó a promocionar el sorteo de flamantes lolas que se realizará el 17 de octubre. Ayer a la madrugada en las pantallas gigantes de la disco apareció una vez más el repetido "Quiero mis lolas". "Todas las chicas que ingresen podrán participar del sorteo", afirman sus organizadores. A partir del 3 de octubre, las chicas que vayan a Sunset pueden llenar el cupón. Para ellas, la entrada cuesta $20. "Queremos incentivar a las chicas desde lo estético", dijo a Clarín el relacionista público del lugar, Fernando Maldonado. Y agregó que "un cirujano de la zona norte operará a la chica ganadora".
Hay más. El boliche Montecristo de la capital cordobesa está organizando una fiesta cuyo nombre aún no está decidido. El encargado de relaciones públicas del boliche, Aquilino Martínez, contó a este medio que están entre "Sin gomas no hay paraíso" (por la novela colombiana) o "Bailando por mis gomas". Arranca el 15 de octubre y continua todos los miércoles, viernes y sábados hasta el 15 de noviembre, día en el que se sorteará la operación entre las mujeres que frecuentaron el boliche y completaron el cupón. La entrada cuesta $10. Martínez explicó que la cirugía "se hará en un centro de buen nivel de Córdoba". ¿Cómo se nos ocurrió? "Tanteamos la idea entre nuestras amigas y conocidas y todas están entusiasmadísimas".
informes: corresponsales en San Juan, La Rioja y Córdoba
"Todas nos morimos por sacar el número ganador"
Son las 3.30. Las seis chicas acaban de enterarse del sorteo por las imágenes que copan cada rincón de Sunset, en Olivos. Dicen que volverán a ese boliche el próximo viernes especialmente para anotarse. "Había visto en la tele que lo hacen en La Rioja. No puedo creer que acá también, ¡buenísimo!", dice, sonriente, Abi Sidders (18), de Paternal. Y sigue, imaginándose frente a un espejo: "Me muero por tener unas buenas lolas". Una pausa, se mira: "¿Te imaginás?". Su amiga, Gisela Arraez (18), le grita: "Sí, estaría bárbaro. Si gano yo, me las levanto. Mi hermana se las hizo, yo también quiero". Alejandra Lagiglia (24), de Vicente López, siente lo mismo: "Tres amigas ya se operaron. Yo también quiero tener más para usar escote". Ana Belén Modarelli (23), de Florida, casada y con un bebé de un año, cuenta: "Con lolas nuevas me sentiría más segura. Mi marido estaría chocho". Delia Costte (21), salvadoreña, y Carolina Amat (19), colombiana, aseguran que se mimetizaron con las argentinas. "Acá es una obsesión. Ojalá gane", confiesa Carolina. Pero no todas se animan. "Si me pongo lolas, no sería por una rifa. Es más seguro ir al médico", dice Lucila Cincota (20), de San Martín. "Claro, no están rifando una remera", remata Agustina Palma (18), de Palermo.
Guillermina De Domini
En cifras
25
Es la edad promedio de las mujeres que se ponen busto.
50%
Representan las cirugías de mamas en el total de estéticas.
40%
Creció en un año la importación al país de implantes mamarios.
10%
Es el porcentaje de turistas que vienen al país a operarse.
Ganó una cirugía estética y se la regaló a su novia
Habían acordado desde antes de la rifa que ella se rellenaría el busto si ganaban.
Por: Julio Aiub Morales
Un estudiante de periodismo ganó el sorteo para hacerse una cirugía estética en una fiesta que tenía como principal "gancho" ese premio y le regaló a su novia una operación de busto.
Romina Castillo (20) y su novio, Martín Palacios (22), fueron la noche del sábado a la fiesta "Aqua" en el golf club de La Rioja. Ambos están en tercer año de Comunicación Social de la Universidad Nacional de La Rioja. Pese a las críticas efectuadas a la fiesta por ofrecer ese premio, para Romina no hay contradicción ética: "es un método publicitario más y todos pueden mejorar su cuerpo" dijo a Clarín. A las cinco de la madrugada, se efectuó el sorteo y una joven de la concurrencia sacó el número 2747. Al principio no aparecía nadie hasta que un joven de chomba rayada, lentes y una incipiente barba perita, se acercó con la entrada en la mano. Las luces de varias cámaras de televisión y fotográficas se dirigieron hacia Martín, quien reconoció que habían acordado con Romina que si ganaban, ella se haría. "las lolas". Todos empezaron a corear: "¡Que aparezca! ¡que aparezca!" Y Romina tuvo que subir al pequeño escenario. Cuando le preguntaron qué se iba a hacer ella, gesticuló con sus manos hacia su pecho.
Si bien la concurrencia a la fiesta no fue la esperada, estuvo bien organizada y ambientada. Conspiró contra ella el revuelo que causó a nivel local y nacional el premio (en un momento se rumoreó que no se haría) y también un imprevisto viento Zonda que hizo descender bruscamente la temperatura. En un informe, ayer Clarín dio cuenta de la creciente tendencia a sortear este tipo de premios.