Además de arruinar carreras deportivas prometedoras, la hormona de crecimiento humano no mejora siquiera el rendimiento atlético. Un análisis de la literatura médica actual sobre el uso de esta hormona, que se publica en “Annals of Internal Medicine”, ha hallado que, si bien aumenta la masa muscular, no mejora la capacidad para el ejercicio.
En diciembre del año pasado, el ex líder de la mayoría del Senado de Estados Unidos, George Mitchell, hizo público un informe que indicaba el uso generalizado de medicamentos para mejorar el rendimiento en el béisbol. "Nuestros hallazgos son consecuentes con el informe de Mitchell", aseguró el autor principal del nuevo análisis, el Dr. Hau Liu, del Santa Clara Valley Medical Center, de San José (Estados Unidos).
Los investigadores, sin embargo, advierten sobre las dificultades de comparar el uso de la hormona del crecimiento en un estudio controlado y el uso en la "vida real". En el mundo real, las dosis de hormona de crecimiento son probablemente más altas y la sustancia se toma a menudo junto a otros compuestos, una práctica conocida como "apilamiento".
El equipo del Dr. Liu había encontrado, previamente, que la hormona de crecimiento no tenía efectos sobre el envejecimiento en personas sanas de edad avanzada. "Señalamos que no podíamos recomendar su uso para fines contra el envejecimiento basándonos en la evidencia actual, porque los riesgos superan los beneficios", explicaron.
Una vez se aclaró esto, los investigadores optaron por ponderar la evidencia sobre la hormona del crecimiento y el rendimiento atlético. Realizaron un metaanálisis sobre 44 artículos existentes de 27 estudios diferentes en los que participaron personas de 13 a 45 años. Todos ellos fueron ensayos controlados y aleatorios.
La toma de hormonas de crecimiento humano produjo un incremento medio de 2 kilogramos de masa muscular magra, que podría incluir músculos, pero también agua. Esto fue estadísticamente significativo. Hubo también un incremento significativo "limítrofe" en la masa de grasa de casi un kilogramo.
Sin embargo, no se obtuvieron mejoras en la resistencia aeróbica. "En todo caso, hallamos indicios de que, en realidad, podría empeorar su rendimiento", explicaron los autores. Las personas que tomaban la hormona del crecimiento tampoco aumentaron su capacidad para levantar objetos.
Dos o tres artículos mostraron niveles incrementados de lactato, factor que puede de hecho dañar el rendimiento atlético. Desgraciadamente, también se determinó la producción de efectos secundarios no deseados.