LONDRES.– Joe ya no le teme a la muerte. De hecho, la última vez que le sucedió más bien disfrutó del viaje. Primero fue lanzado hacia la oscuridad, luego vino una luz brillante, un campo de flores y un hombre vestido de blanco que le contó cosas de su futuro. Más tarde, los doctores le informaron que durante cuarenta y cuatro segundos su pulso se había interrumpido.
Para Joe, su experiencia cercana a la muerte (NDE, según su sigla en inglés, por near death experiences) fue un adelanto muy real de lo que le sucederá luego de la muerte. La ciencia tiene una explicación diferente: las NDE son reales, pero no tienen que ver con la vida en el más allá. Más bien, son ilusiones creadas por un cerebro que se desvanece. Pero a pesar de numerosos intentos, nadie pudo explicar científicamente todos los elementos que las constituyen.
Ahora, un investigador cree que sí. Kevin Nelson, neurofisiólogo en la Universidad de Kentucky, en Lexington, Estados Unidos, señala que las NDE pueden ser poco más que estados similares al sueño, gatilladas por el estrés y una predisposición a un tipo común de trastorno del sueño. Si está en lo correcto, el 40% de nosotros podría estar preparado para ver la luz.
Los recuentos escritos de NDE comenzaron hace más de dos mil años y fueron reportados todo a lo largo y ancho del mundo. La mayoría incluye un "punto de no retorno" que, si se cruza, conduce a la muerte, y una persona que te aleja de él. La identidad de esta persona parece depender de la religión. Los cristianos, por ejemplo, a menudo se encuentran con Jesús o con un pariente muerto, mientras que los hindúes pueden ver a Yamraj, el dios de los muertos.
Para Nelson, esto sugiere que las NDE provienen de algo fundamentalmente humano. "La gente dice que existe un hilo común que los comunica a todos, de forma que debe existir un elemento espiritual", comenta. "Yo miro ese hilo común y veo un proceso biológico."
Sea lo que sea que causa las NDE, la experiencia es sorprendentemente común. Cerca del 20% de los sobrevivientes de ataques cardíacos recuerdan por lo menos algunos de los elementos de una NDE, que pueden incluir sensaciones de estar fuera del propio cuerpo, euforia, túneles o una luz brillante. La mitad de estas personas experimenta NDE completas, que incluyen varios de estos fenómenos.
Fallo cerebral
A pesar de que son bastante comunes, las experiencias cercanas a la muerte nunca han sido explicadas adecuadamente. Las sugerencias más racionales las relacionan con una caída de los niveles de oxígeno en el cerebro, y se han propuesto diversas explicaciones para dar cuenta cabal de por qué esta hipoxia puede gatillar experiencias vívidas.
Algunos científicos aseguran que podrían ser producidas por una molécula hipotética llamada "endopsicosina", que ata las neuronas y las protege de la hipoxia. Otros sospechan que la inundación de endorfinas en la amígdala, la parte del cerebro asociada con las emociones, podría desembocar en euforia y sentimientos de desapego.
La caída de los niveles de oxígeno también podría causar descargas eléctricas -similares a las que produce la epilepsia- en el hipocampo, relacionado con la memoria, hecho que lleva a una repetición de eventos ya vividos. La actividad en la amígdala podría prestarles a estas visiones el matiz espiritual. Otros observadores señalan las anestesias y los analgésicos como posibles causas.
De hecho, la lista de explicaciones sigue de manera interminable. Pero muchas de ellas fallan a la hora de dar cuenta de la experiencia en su totalidad y resultan imposibles de probar científicamente.
Muchas, además, pasan por alto el hecho de que no se necesita que alguien se encuentre a las puertas de la muerte para que tenga una NDE. Un estudio de 1990 en la Universidad del Centro de Ciencias Médicas en Charlottesville sobre 58 personas que habían experimentado NDE encontró que la mitad había sobrevivido sin requerir cuidados médicos de ningún tipo. A veces, un desmayo puede ser suficiente para accionar las sensaciones propias de las experiencias cercanas a la muerte.
Nelson asegura que eso se debe a que, a pesar de su nombre, las NDE tienen poco que ver con la cercanía de la muerte. Argumenta que la experiencia proviene de un ataque agudo de "intrusión de sueño REM", un fallo en el sistema de los circuitos cerebrales que, en tiempos de estrés extremo, puede llevarlo a un estado mixto de conciencia en el que se encuentra a un tiempo en sueño REM y parcialmente despierto.
"El concepto de que nuestro cerebro está o ciento por ciento despierto o ciento por ciento en sueño REM es absolutamente erróneo -asegura el doctor Mark Mahowald, neurólogo en el Centro Regional de Trastornos del Sueño Minnesota, en Minneapolis, Estados Unidos-. Podemos tener porciones de un estado entrometiéndose en el otro, y ahí es cuando las cosas se ponen interesantes."
Un extraño despertar
La intromisión REM es un rasgo común de la narcolepsia, un trastorno neurológico caracterizado por ataques incontrolables de sueño que pueden causar alucinaciones elaboradas y, algunas veces, la sensación de estar fuera del propio cuerpo.
Pero la intromisión REM puede afectar a cualquiera, y frecuentemente lo hace. Estimaciones recientes sugieren que hasta un 40% de las personas experimentaron "parálisis del sueño", una forma de intromisión REM en la que se despierta con parte del cerebro todavía en sueño REM y con el cuerpo paralizado. A menudo el resultado es la aterradora sensación de no poder moverse, acompañada por alucinaciones visuales o sonoras, y por una presión en el pecho.
La parálisis del sueño es considerada una explicación racional para muchos fenómenos aparentemente sobrenaturales, incluidos los ataques de brujas, las visitas de los muertos y, más recientemente, los secuestros alienígenas.
¿Podría la intromisión del sueño REM también explicar las NDE? "Algunos elementos de las experiencias de casi muerte poseen una similitud misteriosa con el estado REM", afirma Nelson. Las caídas y las flotaciones, comunes en los sueños, también suceden en las NDE.
Y a pesar de que los sueños normales se van rápidamente de la memoria, esa combinación estrafalaria de estar dormido y despierto al mismo tiempo hace que la gente con narcolepsia se acuerde de sus alucinaciones de manera vívida. Por esta misma razón, asegura Nelson, pueden recordar sus NDE con lujo de detalle. Mientras tanto, la parálisis total -sello distintivo del REM- puede hacer creer a una persona que, efectivamente, está muerta.
Las intromisiones REM podrían subyacer a otros aspectos de las NDE. "Los narcolépticos, cuyos sistemas REM a menudo se activan mientras están despiertos, son conocidos por su propensión a las experiencias extracorpóreas", asegura Nelson, y la frecuencia de estas experiencias mengua cuando su narcolepsia es tratada con drogas.
Verse desde arriba
Mirar desde el techo cómo trabajan los cirujanos en el propio cuerpo puede resultar especialmente convincente durante una experiencia cercana a la muerte. El doctor Olaf Blanke, neurólogo cognitivo del Instituto de Tecnología Suizo Federal en Lausanne, explica que estas sensaciones aparecen cuando el cerebro no logra entretejer diferentes hilos de información sensorial.
Si las sensaciones táctiles le dicen al cuerpo que se encuentra acostado, pero el tembloroso oído interior hace que la vista sea interpretada como la de una perspectiva en flotación, entonces una persona perfectamente puede "verse" desde el techo.
Blanke les ha hecho ver a algunas personas sus propias piernas separadas del cuerpo desde una perspectiva de flotación estimulando eléctricamente el gyrus angular, un área del cerebro que integra la información sensorial.
Un estado mixto de REM podría interrumpir la integración de la información sensorial de una manera similar, asegura Blanke. El cerebro puede estar consciente, pero la transferencia de la información sensorial y motora del cuerpo está mayormente interrumpida.
New Scientist Magazine © 2007. Distribuido por Tribune Media Services
Por Douglas Fox
De New Scientist
Sensaciones de unidad cósmica o de encuentros infernales
Varía mucho cómo las personas recuerdan estas vivencias
LONDRES (New Scientist).- Para investigar una posible conexión entre el REM y las experiencias de casi muerte (NDE), Nelson inspeccionó la frecuencia de intromisiones REM en 55 personas que habían tenido NDE en una variedad de circunstancias, incluidas desmayos, ataques cardíacos, accidentes de tráfico, caídas de rayos y cirugías. Los comparó con 55 voluntarios sanos, con quienes los emparejó teniendo en cuenta edad y sexo. Los resultados fueron impactantes.
Alrededor del 60% del grupo NDE informó haber tenido síntomas de intromisión REM, ya fuera antes o después de su NDE, comparado con sólo un 24% del grupo control. Lo que es más significativo, las intromisiones REM en el grupo NDE fueron más elaboradas e incluyeron no sólo la parálisis del sueño, sino también alucinaciones. "Se trata de una buena evidencia preliminar", asegura Nelson.
Un argumento en contra es que la intromisión REM es habitualmente una experiencia aterradora, difícilmente reconciliable con los sentimientos a menudo reconfortantes de las NDE. Para responder a esto, Nelson indica que, en el contexto de una NDE, la intromisión REM sucede en una crisis, cuando una respuesta de enfrentamiento o huida ya aguó nuestro miedo habitual. Es algo que todos sentimos alguna vez, una extraña sensación de desapego mientras un cúmulo de autos se acerca en cámara lenta o la posibilidad de administrar primeros auxilios calmadamente para entrar en pánico poco después. Estamos naturalmente preparados, asegura Nelson, para encontrar las visiones reconfortantes.
Recuerdos oscuros
No todos se mantienen calmados durante una crisis, por supuesto, y también es cierto que no todas las NDE resultan tan consoladoras como la de Joe. Algunos sobrevivientes cuentan encuentros infernales que los dejan deprimidos durante meses, luego de ocurridos.
Una mujer vagó a la deriva más allá de las estrellas hasta un vacío infinito, donde escuchó voces que se mofaron acerca de la oscura eternidad en la que estaba por ingresar. A un hombre lo atormentaron múltiples demonios que "parloteaban como mirlos" acerca de su cuerpo colgante, luego de que se intentó ahorcar.
En cuanto a los sentimientos de unidad cósmica que acompañan las NDE más placenteras, Nelson señala que el sistema límbico del cerebro, que incluye la amígdala, se enciende durante el sueño REM. El sistema límbico es el responsable de la emoción y de ciertos aspectos de la memoria, y diversos estudios desde hace tiempo lo han implicado como una vara luminosa -algunos dirían la vara de Dios- para las experiencias religiosas.
Su estimulación eléctrica induce sentimientos trascendentales, y los pacientes con epilepsia cuyos ataques se originan en esta parte del cerebro comentan haber experimentado profundas revelaciones espirituales.
Las ideas de Nelson han sido bien recibidas por algunos. "Muchos de nosotros habíamos pensado que las intromisiones REM eran una explicación plausible -afirma Mahowald, que ha pasado décadas tratando a pacientes narcolépticos-. No se necesita mucho para extrapolar a las experiencias de casi muerte lo que escuchamos durante treinta años."