¿Cómo funciona el Sistema de Atención Médica de Emergencia?
El SAME proporciona asistencia medica extrahospitalaria en el area de la ciudad autónoma de Buenos Aires (una población estimada según el último censo del INDEC de 2.781.000 personas, más un estimado de 3.000.000 de personas que ingresan y egresan diariamente a la Ciudad). Su prestación principal es el de auxilio frente a la emergencia. Uno accede al sistema a través del 107, que cuenta con 20 líneas rotativas y con el 40923-1051/58, ocho radiooperadores reciben los llamados y los mismos son categorizados según normas del propio SAME en tres grados, en una grilla se anotan qué tipo de auxilio se requiere, esto es su categorización, dirección y teléfono, y seguimiento hasta su finalización.
Las grillas de clasificación pasan a otros operadores que despachan los móviles de acuerdo al área programática de cada hospital. Vale aclarar que hace aproximadamente 10 años la ciudad fue dividida en áreas con cantidades similares de población; cada una responde a uno de los 13 hospitales generales de agudos. Así, cada área programática de cada hospital es responsable -en teoría- de la misma población de personas para su asistencia.
El SAME recibe entre 1800 y 2100 llamados por día. Muchos de los pedidos pueden resolverse telefónicamente; para los que requieren asistencia despachamos un promedio de 700 auxilios día. Es bueno aclarar que el SAME funciona como un servicio regulado: se categorizan, como ya adelantamos, los auxilios en tres grupos: grado 1, urgente con riesgo de vida, en este caso nuestro objetivo es llegar en menos de 10 minutos, grado 2, urgentes sin riesgo de vida inmediato, y grado 3, que no revisten urgencia pero igualmente son atendidos. Volviendo al sistema, si la situación lo amerita, un médico regulador atiende el llamado y da las indicaciones telefónicas necesarias hasta la llegada del móvil, por ejemplo en el caso de un paro cardíaco.
¿Cuál es el vínculo que tienen con la Policía u otros involucrados en situaciones de emergencia?
Tenemos un canal de comunicación que compartimos con el Comando de Policía, Prefectura y Bomberos, Jefatura de Gobierno, Defensa Civil. Se usa habitualmente para emergencias en la vía pública, casos de catástrofes, etc.
¿Con cuántos móviles cuenta el SAME en la actualidad?
En este momento el SAME tiene 69 ambulancias en funcionamiento, aunque en realidad tenemos 110 móviles, contando todos lo tipos de vehículos.
¿Qué personal -y con qué capacitación- viaja en cada ambulancia?
En la ambulancia viajan el chofer y el médico. Pero aquí me gustaría aclarar que de los 614 agentes que tiene el SAME, solo 17 son médicos que cumplen funciones de regulación y coordinación. Los médicos que suben a las ambulancias -que tienen base en los hospitales generales de agudos- pertenecen a esos mismos hospitales. Solo en las bases extrahospitalarias (como el Centro, que necesita móviles exclusivos por la dificultad de acceso a la zona durante el día) las ambulancias trabajan con profesionales que dependen del SAME en forma directa.
Considero que esta situación es un déficit porque, al no tener dependencia, nos cuesta formarlos y darles capacitación. Nos falta formar un perfil de médico de emergencias: el profesional que envía el hospital cambia cada día.
La ambulancia es la cara visible del sistema y no tener pleno control sobre sus actores es una situación que entorpece el buen desarrollo de nuestra tarea.
¿Cómo debería funcionar esa dupla?
El chofer y el médico son un equipo. Nosotros estamos haciendo un curso para los choferes -que sí dependen de nosotros- para explicarles qué es un evento traumático, cómo es un mecanismo lesional, cómo se inmoviliza a un paciente, las maniobras, los tipos de tabla, cómo se libera la vía aérea, etc. El chofer es la mano derecha del médico: tienen que tener una comunicación muy rápida y trabajar en equipo, cosa que hoy no se puede lograr con médicos que rotan todos los días...
¿Qué otros servicios presta el SAME?
El SAME tiene otras líneas alternativas. Por ejemplo, la línea pediátrica que atiende de 21 a 8 hs., donde recibimos unas 300 consultas por día, muchas de las cuales se solucionan por teléfono. Si no pueden resolverse por esa vía, se envía un móvil a cargo de un pediatra.
También tenemos una línea "obstétrica" que funciona las 24 horas a cargo de un obstetra que evacua consultas y, además, envía una ambulancia de ser necesario.
Ahora estamos implementando un nuevo programa para superar las dificultades de acceso al sistema de poblaciones con diversa discapacidad: esto se refiere a que se puede tener la mejor ambulancia aquí y darse una colisión de un vehículo a la vuelta pero si no se produce la comunicación, el sistema no se pone en funcionamiento. Este tema está resuelto en la ciudad de Buenos Aires (unificada bajo el número 107) pero no funciona en el resto del país de la misma forma.
Regresando al tema anterior, una gran dificultad de acceso al sistema se da en el caso de las personas hipoacúsicas. El 12 por ciento de la población tiene problemas de dicción y el 3 % es sordomuda severa por lo que, según nuestros datos, manejamos una población de entre 120.000 y 150.000 sordomudos que viven o trabajan en la ciudad y no tienen manera de llamarnos.
Sabemos que las compañías telefónicas les ponen aparatos de fax a sus clientes sordomudos. Entonces armamos una planilla realizada en combinación con la Asociación Argentina de Sordomudos para poner en funcionamiento una línea especial para hipoacúsicos a la que podrán enviar estos formularios (que distribuiremos en clubes, escuelas, etc.) describiendo los síntomas a través de un 0800 totalmente libre y gratuito.
También tenemos la intención de traducir esta planilla y enviarla a las distintas embajadas para que todos los extranjeros puedan también comunicarse con el SAME y solicitar ayuda si la necesitan.
Otras acciones que realiza el SAME son campañas de vacunación, campañas oftalmológicas, pedidos de sangre y disposición de traslados entre hospitales.
¿Cuáles son los cambios que se están introduciendo para optimizar el servicio?
Estamos comenzando a informatizar el SAME: es difícil porque hay gente que trabaja con nosotros que no está familiarizada con el manejo de computadoras. Por eso estamos realizando un curso para interiorizarlos y capacitar en el uso de los programas.
Esta modernización le va a dar mayor rapidez al despacho: en este momento entre la recepción del llamado y el envío del móvil transcurre un minuto, la idea es hacer descender ese tiempo a 25 segundos. Por otra parte nuestra idea es tener un sistema georreferencial en tiempo real, que es lo que colocaríamos en nuestras Unidades de Asistencia pero es costoso acceder a un sistema de esas características.
La situación que atravesó la ciudad de Santa Fe nos motiva la pregunta que sigue: ¿la ciudad de Buenos Aires está preparada para una situación de catástrofe?
Hagamos una salvedad: en cualquier lugar del mundo una inundación es un fenómeno climática, en la Argentina es un suceso político. Pero la ciudad de Buenos Aires está preparada: hemos realizado varios simulacros y todos los operativos que se tuvieron que realizar (recordemos la explosión de la Embajada de Israel, el atentado a la AMIA y el desastre del avión de LAPA) salieron razonablemente bien.
El SAME cuenta con una unidades de catástrofes (un móvil especialmente diseñado y equipado para asistir en este tipo de eventos) y, además, tenemos una buena convivencia con la policía y bomberos, con los cuales hacemos entrenamiento conjuntos.