La EA es una enfermedad inflamatoria crónica caracterizada por la anquilosis del esqueleto axial, la inflamación de las inserciones tendinosas (entesitis) y, a veces, artritis periférica.
Aunque la EA ha sido considerada una forma benigna de la artritis, expresan los autores, un estudio reciente demostró que las tasas de dolor y discapacidad entre los pacientes con EA son similares a las de los pacientes con artritis reumatoidea.
Además, agregan, muchos pacientes tiene síntomas inflamatorios graves, aún después de décadas de haberse realizado el diagnóstico de la enfermedad, y no se cuenta con un tratamiento efectivo para su progresión.
El TNF-a puede intervenir en la patogénesis de la EA y otras formas de espondiloartritis. Se ha demostrado que tiene una mayor expresión en el suero, la sinovial y las articulaciones sacroilíacas de los pacientes afectados.
También se ha demostrado que los agentes anti TNF-a tienen eficacia en las artritides inflamatorias.